Cada mañana, hace veinticinco años, Leonor Pardo, fundadora de El Jardín Encantado, se levanta a las cuatro de la mañana y prepara la receta mágica de néctar casero para sus pequeños. Es impresionante sentir y ver el amor y cariño que ella les tiene a estos bellos seres.
27 de las 165 especies de colibríes que han sido clasificadas en Colombia, visitan a diario el jardín de Leonor, por ejemplo, la especie de colibrí más pequeña del mundo. Otras aves, como los canarios silvestres, también llegan a diario para disfrutar de pequeñas porciones de arroz.
Ubicado a las orillas del río Cañas en el Municipio de San Francisco de Sales, este lugar tiene como misión reafirmar el respeto por la naturaleza, en especial, por los colibríes, compartiendo espacios con responsabilidad y compromiso. Ser una fundación sólida, líder en la observación del colibrí y la contribución científica, también es uno de sus objetivos.
A continuación, les dejo una linda galería de las fotos que tomé ese día y un video para que se animen a ir a este precioso paraíso en la tierra!
Datos curiosos de los colibríes por El Jardín Encantado
Son las aves más pequeñas del mundo
En proporción a su tamaño, poseen el cerebro y el corazón más grande del mundo.
No poseen el sentido del olfato.
Mueven sus alas entre 60 y 90 veces por segundo.
Su corazón late entre 500 y 1.200 veces por minuto.
Para sobrevivir, consumen más de su peso en comida cada día, esto equivale entre 6.000 y 12.000 calorías por día.
La dieta de los colibries consiste en néctar savia e insectos.
Su velocidad es de 72.4 Km/h.
Ellos no pueden caminar, solo posarse.
Su lengua es 2 veces más larga que su pico.
Posee poca grasa corporal y dependen de su metabolismo para mantenerse calientes.
En la noche su temperatura cae de 30ºC a 21ºC y su corazón late 158 veces por minuto.
Su territorio se extiende desde el sur de Alaska hasta el lugar más austral de Sudamérica, pero la mayoría vive en el área tropical especialmente Colombia y Ecuador.
Fotografía y video por The Art of Being Green