Las verduras más rentables para tu huerto o jardín.

Las verduras más rentables para cultivar.

Si tu idea es plantar verduras con la esperanza de ahorrar dinero, en el artículo de hoy te voy a dar algunas sugerencias para que puedas cultivar hortalizas y verduras de forma rentable y ahorrar en los costes.

Las verduras más rentables para cultivar.

Si tu idea es plantar verduras con la esperanza de ahorrar dinero, en el artículo de hoy te voy a dar algunas sugerencias para que puedas cultivar hortalizas y verduras de forma rentable y ahorrar en los costes.

Lo cierto es que hay muchos beneficios a la hora de cultivar tus propias verduras, aunque no siempre el ahorro del dinero es uno de ellos.

Sin embargo, algunas verduras suelen ser más baratas compradas en la frutería que el que las plantes y coseches tu mismo.

Con los años y la experiencia en los cultivos de hortalizas, hemos podido comprobar que el ahorro del dinero no es la razón primordial para su plantación en nuestros huertos, pero aún así el beneficio que obtenemos de su sabor y el trabajo sí que son importantes para nosotros.

Y cuando hablo de trabajo, ya sabes a que me refiero; quitar hierba, labrar, regar y otras actividades en la cosecha, hacen que a menudo nos desaliente el mero hecho de querer plantar en nuestro jardín y que obtenemos por comprar aquellas hortalizas que son de temporada y que están a un precio muy barato.

Si eres de aquellos que quieren cultivar verduras con la esperanza de ahorrar dinero, o quieres maximizar el espacio en tu jardín reducido, aquí te traigo algunas sugerencias para que puedas cultivar hortalizas y verduras a buen precio.

Sin embargo, tienes que tener en cuenta que a la hora de la planificación tu jardín o la compra de semillas, tienes que elegir las variedades que sean las más idóneas para tu región de cultivo.

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Incluso, dentro de las regiones o en particular de tu comunidad, hay “microclimas” que pueden llegar a afectar las condiciones y el rendimiento de tus cultivos, por ello es importante que compruebes antes de plantar, que especies o variedades son las más recomendadas para tu localidad.

1. Lechuga.

La lechuga es un producto que con el paso de los años se ha ido incrementando en cuanto a coste.



Sin embargo, si te paras a pensar, y comparas el mantenimiento que tiene su plantación, el coste que tienen las semillas con el producto que vas a obtener en la frutería, verás que sale muy rentable el poderla plantar en tu huerto, eso sin contar que vas a comer una lechuga fresca cada vez que la necesites.

Posiblemente no vayas a usar todas las semillas que compras, por lo que las sobrantes las puedes guardar y replantar cada dos o tres semanas durante la temporada de crecimiento, esto asegurará un suministro constante para tu casa y familia de forma habitual y en condiciones optimas para la alimentación.

A pesar de que hay infinidad de tipos de lechuga, te recomiendo que la variedad tipo Iceberg no esté entre las que uses para plantar, ya que tarda más tiempo en madurar y cuando lo hace te da una cosecha muy extensa, por lo que si no usas muchas se pueden echar a perder.

Las variedades de hoja verde son fáciles de cosechar escogiendo las hojas exteriores y esto permite que la planta siga creciendo y produciendo.

2. Los pimientos verdes.

Con los pimientos pasa un tanto igual que con la lechuga.



Piensa que plantar unas diez plantas de pimiento te puede producir entorno a los 6 pimientos por mata aproximadamente.

Tienen poco mantenimiento, incluso si los dejas madurar hasta que cojan su color rojo puedes obtener un sabor más dulce que los pimientos verdes.

Algunos jardineros en casa han hecho una inversión de 10,00 € en el cultivo… (Semillas y algún abono) y han obtenido un rendimiento o cosecha por valor de 100,00 €.

Puedes utilizar turba o enmiendas de fosfato, si así lo requiere el suelo donde vayas a plantar tus pimientos, para rentabilizar aún más la cosecha.

Te cuento más, incluso puedes empezar a cultivarlos en macetas y jardineras para después trasplantarlos a la tierra.

Visita nuestra sección de macetas y jardineras.

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Recuerda que la recogida de tus pimientos debe ser cuando alcanzan su tamaño ya que esto estimulará a la nueva fructificación y aumentara el rendimiento por planta.

Puedes dejar algunos pimientos en la planta para que su sabor sea más dulce y puedan ponerse de color rojo o amarillo, aunque ya sabes que estas plantas producirán menos pimientos.

3. El Ajo.

Te asombrarías del rendimiento que tienen los ajos a la hora de ahorrarte dinero, pero fácilmente te puedes ahorrar casi 7 veces más de lo que pagas en la frutería.

El ajo es uno de los cultivos más fáciles que existen, pero tienes que tener mucho cuidado con el riego que le proporcionas y sobre todo cuando están maduros.

Cosecharlo a tiempo y curarlo adecuadamente son importantes aspectos que debes vigilar a la hora de su cultivo para que tengan unas cualidades óptimas de conservación.



Consulta con expertos en tu región o comunidad autónoma para que te den pautas a la hora de cuál es la mejor época del año para su plantación.

4. Calabaza de invierno.

La calaba de invierno puede ser una de las especies favoritas y son muy fáciles de cultivar ya que no requieren deshierbe una vez están plantadas y lo más importante, se mantienen durante todo el invierno produciendo.

De todas formas, tienes que preparar el suelo para que sea rico y tienes que tener espacio suficiente para los surcos y poder moverte entre ellos, por lo que si tienes espacio suficiente en tu jardín, es un cultivo muy apropiado.

5. Tomates.

El ahorro con los tomates es también una razón importante a la hora de decantarte por plantarlos en tu huerto.

Sin entrar en muchos detalles, podría hablarte de que puedes ahorrarte entre 3 y 4 partes en comparación con el dinero que te puedas gastar en la frutería o supermercado.

Hay variedades que dan un rendimiento muy óptimo.

Otras variedades, como el tomate cherry proporcionan una cosecha temprana.

Si tienes un suministro de tomates para cocinar durante los meses de invierno también te va a resultar en una gran recompensa ya que el precio es más elevado durante esta época del año.

6. El brócoli.

El brócoli es bastante barato, pero su cultivo tiene un rendimiento muy grande ya que aún teniendo cosecha, puede seguir con brotes laterales que harán que vuelvas a tener frutos.

Sin embargo, con esta especie, el ahorro de dinero no es que sea para emocionarse, pero la comodidad de poder recoger brócoli fresco

Durante 6 a 8 meses en el año es una verdadera ventaja.

El brócoli es un cultivo de estación fría, y se puede cultivar tanto como un resorte como en una cosecha de otoño.

Recuerda que el suelo para el cultivo del brócoli tiene que ser rico en materia orgánica.

El brócoli es muy nutritivo y se ha considerado como un alimento anti-cancerígeno, aportando grandes cantidades de vitamina A, calcio y riboflavina (Vitamina B2)

Como puedes ver, después de leer el artículo, las cifras o incluso los productos que he elegido no son todos los que están.

Son consideraciones a modo de información y con datos en general, por lo que hay otros cultivos que también pueden ser rentables para que puedas cultivar en tu huerto, incluso podrías llegar a la conclusión que algunos de estos cultivos no son apropiados para tu región.

Sin embargo, sí que son un ejemplo para ilustrar que el crecimiento de tus propias verduras puede reducir los gastos en tu economía familiar, solo tienes que elegir correctamente aquel cultivo que sea el idóneo en la región que lo vayas a cultivar.

Como cualquier jardinero, o incluso aficionado a la jardinería, sabe qué cultivos son los que más beneficios pueden darle tanto para el crecimiento como qué hortalizas y verduras son más saludables para su familia, ya que el producto fresco y recién cogido de la huerta es más beneficioso tanto para el medio ambiente como para nuestras familias.

Cultiva hortalizas y vegetales si dispones de sitio en tu jardín o huerto para sacarle beneficios a su rendimiento, obtener un ahorro en la cesta de la compra y aprovecharte de las magnificas cualidades que puedes obtener de una alimentación sana.