Si queremos que nuestro girasol mire al astro rey con un color amarillo intenso y unos pétalos y semillas cuidadas, debemos prestar especial detalle en el cuidado del girasol.
A pleno sol: como es de esperar, el mejor amigo de la estrella del fuego debe estar situado siempre a plena luz. Este será el factor más importante.
Riego constante: no podemos permitir que nuestro girasol tenga sed. En el caso de que pasase, él nos lo hará saber porque su follaje se entristece. Debemos regarla con continuidad para aumentar su productividad, pero no en exceso.
Suelo profundo: debido al largo tallo de esta planta, el suelo debe ser muy profundo y cargado de nutrientes. El fósforo es un elemento que le ayuda satisfactoriamente. Debemos tener cuidado con el suelo ya que al estar expuesto al sol tanto tiempo se puede resecar.
Época de siembra: debéis recordar que es ahora en la primavera cuando hay que plantar los girasoles. Si en vuestra ciudad aún hace frío, también podéis comenzar porque soportan temperaturas bajas.
Ahora es la época de siembra. Preparad la tierra, un buen drenaje, un lugar soleado…y a esperar a que florezcan en verano. ¿Os animáis? ¡Mucha Suerte!
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