Esta información va dirigida si tienes o quieres obtener una linda orquídea por primera vez, así que toma nota para que sepas qué hacer ante cualquier situación que se pudiera presentar. Las orquídeas florecen de una forma espectacular, sus flores y variedades son de gran tamaño, ya que pueden ser gigantes, intermedias, pequeñas y las de flor miniatura. Crecen en las copas de los árboles en zonas tropicales, lugares ideales para que las raíces se adhieran a la corteza de los árboles.
Adecuando el mejor sitio para la exposición de luz
Para comenzar, debes saber que este tipo de planta lucirá y crecerá perfecta en interiores. No obstante, por ser una planta que crece en lugares de gran humedad, les gusta el sol directo en otoño e invierno pero no en primavera o verano, donde ocuparán un poco de sol durante la mañana o tarde. Sitúa a tu orquídea en un lugar luminoso. Un dato curioso es que las orquídeas florecen en relación a la dirección de luz que obtengan, por ejemplo, si esta ubidacada frente a una ventana, es muy seguro que el crecimiento del tallo se dirija a la ventana en dónde encontrará bastante luz. Debido a esto, algunas orquídeas están sujetas por un pequeño palo de madera a manera de sujetador.
Troncos, no tierra
Otro punto esencial que debes reconocer al instante es que la tierra que lleva una orquídea no es la misma que acostumbramos a ver en otras plantas. Las orquídeas requieren de un tipo de corteza de árbol especial, por ende, no debemos trasplantarlas cuando las llevemos por primera vez a casa. Por ello, cada dos años se saca la planta, se renueva la tierra y se recortan las raíces que podrían estar enfermas.
Aprende a regar una orquídea
Las orquídeas se riegan generalmente una vez a la semana, dependerá mucho del tipo de orquídea, la temperatura y la estación del año.
Al momento del riego deberás ponerles un plato debajo de la planta, esto, con la finalidad de que puedas rociar agua por encima o sumergirla en un recipiente con agua, cuidando de no forzarla para que no salga de su recipiente, con una duración de 5 minutos a 10 minutos. El plato ayudará a escurrir los excesos del agua para que posteriormente puedas pasar tu orquídea al macetero. Un tip para saber si tu orquídea requiere riego es observar las raíces. Si el color que tienen es un color grisáceo, esto quiere decir que es momento de un buen baño, claro, sin olvidar dejar escurrir la planta, verás inmediatamente que las raíces se tornan verdes.
Floración
Algo que debes de tomar en cuenta si quieres asegurarte de que tu orquídea se encuentre sana, son las hojas. Revisa su textura, la cual debe ser al tacto dura y tersa, con un verde intenso. Acto seguido, si lo que deseas es volver a ver el tallo lleno de flores, deberás ser paciente, ya que florecen una vez al año, sin embargo, vale la pena la espera.
Si el caso es que tu orquídea ya no tiene flores o se han estropeado, lo mejor será que mantengamos con cuidados básicos nuestra orquídea para darle la oportunidad de que se formen nuevos tallos para que florezca. También servirán para experimentar una segunda floración un poco más pequeña que la primera pero no menos importante. Las orquídeas suelen reproducirse sacando pequeñas hojitas en ramas y brotes en la parte inferior. Pero si no te basta y lo que quieres es una floración como la primera, lo que debes hacer es cortar por encima del nudo del tallón floral para que brote un nuevo tallo floral teniendo otra vez una floración completa.
Abono :¿Qué tipo? ¿Cada cuánto?
Esta planta deberá ser abonada siempre que esté en flor cada 15 días con un abono específico de orquídeas. Y cuando no esté en flor con una vez al mes será suficiente para mejorar y proporcionar los nutrientes esenciales.
Es preciso que no coloques directamente el abono y el agua sobre la planta, será mucho mejor si se hace regularmente pulverizándolas con un atomizador, pero nunca directo en las flores ya que pueden marchitarse y pudrirse. Si habitas en un lugar seco, tendrás que crear humedad para tu planta, pulverizando el agua en el entorno de las hojas o con un paño húmedo para que genere las condiciones ambientales adecuadas y garantice la floración. La falta de humedad ambiental ayudará a que tu orquídea genere nuevos tallos y la regeneración mediante la pulverización.
Estas lista para empezar a criar tu primera orquídea, como ves resulta ser una planta de cuidados sencillos pero bien dados. También podría interesarte información acerca del cuidado de otras flores para que tu jardín o tus interiores luzcan espectaculares. No olvides consultar los posts que tengo para ti visitando mi blog personal en dónde podrás encontrar todo lo necesario para el manejo de tus plantas.