Tradicionalmente se ha utilizado para aliviar la fiebre, de ahí su nombre inglés feverfew, así como los dolores de oído y menstruales. Esta gran manzanilla, poco corriente, es el remedio específico de las jaquecas. Sus sumidades floridas contienen partenólido, al que la planta debe su actividad contra dicha afección.
Hoy en día, conocemos el mecanismo que desencadena la migraña. Como consecuencia de un factor favorecedor (estrés, emoción, ciertos alimentos, ciclo menstrual...), se produce una liberación de serotonina en el organismo que induce una alternancia de contracciones y dilataciones de las arterias cerebrales produciendo el dolor.
El partenólido bloquea la liberación de serotonina, de forma que previene de manera eficaz las crisis migrañosas. Un tratamiento de tres meses previene la aparición de las migrañas, reduciendo tanto la frecuencia como la intensidad de las mismas.
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Fuente: Arkocápsulas / Arkopharma
Imagen: Chipmunk_1 - Flickr.
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