Cultivador: Meilland
Variedad: Grandiflora
Flor: Clásica. 35 pétalos. 12cms de diámetro
Color: Rosa bengala
Perfume: Fuerte, maracuyá y rosas antiguas
Altura: 100 a 110 cms.
La rosa Caprice de Meilland Meisionver, es un grandiflora de color rosa bengala muy llamativo, tanto por el color de sus rosas, el tamaño de las flores y el intenso perfume a maracuyá, la fruta de la pasión.
Es evidente que el cultivador de esta rosa son los viveros franceses Meilland. Sus progenitores provienen de una semilla fruto del cruce del rosal Tino Rossi y el híbrido de te, Rendez-Vous de Meilland, cruzada con el polen del rosal híbrido de té Meilland, Sonia.
Esta variedad fue presentada en 1997, relativamente hace poco para una variedad de rosas, bajo el nombre de registro MEIsionver, aunque su nombre comercial y de exposición es Caprice de Meilland.
Las grandes rosas que adornan este arbusto muy vigoroso, llegan a medir 12 centímetros de diámetro, con 35 pétalos de color rosa púrpura. La forma de la rosa, la define Meilland como suntuosa, en forma de cornete.
Es un rosal muy perfumado, con aromas afrutados que recuerdan al maracuya, y toques de rosas.
Florece en oleadas durante toda la primavera-verano, hasta entrado el otoño de forma casi constante.
El rosal Caprice de Meilland se puede utilizar como rosal aislado o para crear fronteras, setos…pero sin duda es ideal, como rosal de corte para tener rosas frescas durante todo el verano.
Crece como un arbusto de follaje denso, con hojas brillantes de color verde oscuro...es bastante resistente a las enfermedades.
Cuando llega a la edad adulta, puede medir unos 50 centímetros de diámetro y alrededor de un metro de altura.
Es un rosal muy premiado, en 1997 recibió el premio del perfume en París, a la fragancia en Nantes, y la medalla de oro en Roma. Rosa del año y Best Great Flower Hamilton, en 2002.
Cuidados de la rosa Caprice de Meilland
Los rosales producidos por el vivero Meilland son de fama mundial debido a su resistencia, el rosal Caprice de Meilland no es una excepción, se trata de una variedad rústica y resistente...aún así, hay que tener en cuenta que para conseguir un arbusto sano, vigoroso y que nos ofrezca buenas floraciones, hay que seguir las indicaciones del obtentor.Exposición al sol
La rosa Caprice de Meilland es un rosal que necesita exposición directa al sol, lo que se traduce como una exposición mínima entre 6 y 8 horas diarias.
Si el rosal recibe menos horas de sol directa, lo veremos reflejado en su floración, que será menos abundante y de un tamaño menor.
Emplazamiento
Aguanta todo tipo de climas y cualquier suelo, es muy rústico y se adapta bien. Pero no elimina las salvedades típicas de los rosales:
Suelo que drene bien
Rico en nutrientes
Orientación soleada
Riego
Los viveristas y jardineros, recomiendan regar los rosales dos o tres veces a la semana durante la época de crecimiento, aunque lo cierto es que si tienes un jardín con riego automático, también se adaptarán perfectamente a un riego diario. En estos casos, lo importante es darle la cantidad de humedad que necesita sin dejar que el arbusto se seque, pero tampoco que se encharque.
Si el riego lo realizas a manguera, es muy importante regar la base del rosal evitando mojar las hojas, para prevenir la aparición de hongos.
Abono
Los rosales son arbustos que necesitan un buen abonado rico en nutrientes. Lo ideal es utilizar abonos orgánicos para mejorar el suelo, y la época adecuada es al finalizar el invierno y comienzo de la primavera, cuando el rosal empieza a crecer lentamente.
Posteriormente, y con la idea de conseguir una mejor floración, añadiremos abonos químicos de liberalización más rápida.
Poda
La poda de los grandiflora, como es el caso del rosal Caprice de Meilland, no difiere de los híbridos de te y los arbustivos.
Hay que podar para mantener el orden, eliminar todas aquellas ramas muertas, débiles o que se cruzan y que provocan roces y heridas.
La intención es que el aire circule bien por el interior del arbusto. Los cortes deben ir encaminados a que no queden ramas en el interior, y que el futuro crecimiento del rosal sea hacia el exterior.
Es importante realizar una poda en altura adecuada. No se trata de dejar las ramas a la altura del cepellón…cada rosal necesita una altura distinta, y es mejor pecar de dejar las ramas largas, que cortas. Por ejemplo, los rosales ingleses prefieren una poda ligera para florecer mejor.
Si vemos que las hemos dejado demasiado largas, al año siguiente podemos hacer una poda más drástica.
Plagas y enfermedades
Es un rosal que aguanta bien los ataques por hongos, no es precisamente muy susceptible de enfermar.
Los ataques de insectos, tipo pulgones, araña roja, etc, se deben en ocasiones a las circunstancias del jardín.
Para evitar su aparición, es importante que sigamos las instrucciones de abonado, riego y poda al pie de la letra.
Si aún así, aparecen debemos tratar con fungicidas apropiados. Si tenemos intención de prevenir la aparición de plagas, deberíamos utilizar fungicidas de amplio espectro.