Plantar en macetas te garantiza: conseguir un gran efecto por un gasto modesto. Y mejor todavía, son fáciles de lograr y mantener sin invertir demasiado tiempo o esfuerzo. Prueba con estos consejos:
Compra un paquete de semillas de rápido crecimiento, como zinnias enanas, ageratos damasquinos (ageratum), alyssums dulces, brovalias (browallia), o candytufts. Distribuye las semillas entre varias macetas. En semanas tendrás una atractiva masa de coloridos brotes, por centavos.
En una maceta de 12 pulgadas (30.48 centímetros, planta 6 paquetes de caléndulas o petunias de un solo color o mézclalos y disfruta el show de color durante todo el verano.
Toma esquejes de crisantemos durante su desarrollo en primavera. Con un cuchillo filoso, corta tallos de 3 pulgadas. Presiona cada uno en una pequeña maceta con mezcla de suelos y arena. Para el otoño, las nuevas plantas estarán listas para florecer y ser transplantadas en macetas más grandes luego de terminada la floración.
Recicla plantas perennes o alguna cubierta vegetal (groundcovers), tomando secciones, plantándolas y dejándolas que pasen un verano en macetas. En primavera divide en varias las plantas muy crecidas o maduras, para formar nuevas plantas. Coloca en macetas hostas, helechos (ferns),diamantes (pachysandra), dominicanas (vinca) y serpentinas (Liriope), resisten a la sombra. En zonas con clima frío, los injertos deben ser plantados en el jardín, a principios del otoño.
Otórgale nueva vida a los viejos objetos. Renueva una caja de madera, una vieja caldera o una carretilla de jardín y conviértela en el hogar de tus plantas. Coloca varias plantas en un gran contenedor o un grupo de pequeñas macetas, cada una con plantas diferentes y haz una gran exhibición en tu jardín.