Entre la multitud de beneficios que, según especialistas y consumidores, aporta esta planta, que te puede hacer preguntarte cómo preparar la planta de la insulina, el más destacable es sin duda que ayuda a disminuir en gran parte la glucosa de la sangre, lo que ocasiona que su consumo sea preferido entre pacientes que sufren de diábetes. Es por esta propiedad que se le da el nombre de “planta de insulina”, pues según los estudios realizados, la misma tiene la capacidad de aumentar la producción de insulina del cuerpo, lo que ayuda a la eliminación de parte de la glucosa.
Además, su uso es recomendado como: diurético, antioxidante, anti-microbiano y anti-cancerígeno, gracias a componentes como proteína, hierro, vitamina A y C, esteroides y flavonoides. El método más común para preparar la planta de la insulina es en infusión, añadiendo en una olla pequeña una taza de agua con tres o cuatro hojas de esta planta, tapando y dejando hervir para que la misma libere todos sus compuestos en el líquido que debe consumirse caliente, preferiblemente sin endulzar, aunque su sabor es un poco amargo.
Sin embargo, los especialistas recomiendan consumir la hoja de la insulina fresca y cruda, en dosis de no más de cuatro de estas al día, masticando dos en la mañana y dos en la noche durante la primera semana de tratamiento; luego de esto, reducir a solo una al despertar y una más antes de acostarse. Esto se debe a que consumir en exceso esta hoja puede causar efectos secundarios como el desorden cardíaco, debido al ácido palmítico que contiene.
Ya sabes cómo tomar la planta de insulina, solo debes tener en cuenta algunas recomendaciones para no afectar tu salud.