El jardín del abuelo se ubica en la localidad toledana de Ciruelos, allí, nos encontramos con este bello jardín en medio de la meseta castellana, que cuenta con todo el encanto de los jardines antiguos de nuestros abuelos.
Su profusión del jardín del abuelo tiene elementos decorativos típicamente españoles (las tinajas, el pozo) y la elección de plantas autóctonas (coníferas, vivaces) lo convierten en un rincón tradicional que tiene aroma a nostalgia.
Sin embargo, tampoco faltan otros componentes menos localistas, como pueden ser nenúfares, bambúes, hemerocallis o palmeras.
En definitiva el jardín del abuelo, se trata de un conjunto heterogéneo, pero uniforme, donde cada elemento nos evoca los recuerdos más bellos de la niñez.
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- En este reportaje te mostramos un precioso jardín con elementos reciclados.
Bajo un gran pino carrasco (pinus halepensis) podemos observar unas tinajas antiguas, uno de los elementos preferidos de la propietaria. La dueña disfruta viéndose rodeada de ellas, ya que este tipo de piezas transmiten mucho tiempo vivido. A su vez, la tinaja hace de cubeta contenedora de plantas colgantes (hiedras).Bello rincón creado con aspidistras cerca del tradicional tendal para la ropa, que ya muchos hemos olvidado por innovaciones tecnológicas como la secadora. Podemos observar algún frutal al fondo y un espacio definido por la pradera de césped. Los frondosos aligustres ofrecen la intimidad necesaria al jardín.
El gran punto focal del jardin lo constituye este fabuloso ejemplar de sauce llorón (salix babylónica) a cuyo pie se asienta una rocalla con bellos aires rústicos. Está compuesta de coníferas rastreras como juniperus h.glauca y de plantas vivaces como hemerocallis o phlox.
Las cañas de bambú (phyllosthachis aurea) emergen en una de las esquinas del parterre. Su aire exótico contrasta con el resto de elementos de jardín. Se sitúa bajo un arce negundo que está plantado en una zona sin pradera y decorada con algunas rocas.
Aquí tenemos una colorida vista de los parterres de flores frente al proche trasero de la vivienda.
En el cenador se combinan los eumonymus aureo marginata (evónimus), en plantación fija en el terreno junto con plantación en jardineras, creando un efecto acogedor a la vez que refrescante. Al fondo podemos ver los bambúes.
En el "Pozo de los nenúfares" el abuelo Juan ha creado un hábitat apropiado para que se desarrollen los clásicos nenúfares.
Magnífico ejemplar de Phoenix canariensis (palmera fénix), de inmejorable aspecto y salud que resiste los crudos inviernos de la alta meseta castellana gracias a los cuidados y mimos del abuelo Juan. Aquí podemos apreciar la palmera desde la panorámica de la piscina integrada plenamente en el jardín.
Otro elemento nostálgico y típicamente castellano: este rincón con piezas de una antigua bodega de Villarrubia de Santiago nos trae el aroma del vino y la arcilla de las tinajas. Como en el caso anterior, algunas de ellas sirven como macetas para hiedras.
Panorámica general del rincón y el parterre de flores de temporada (en este caso muchas petunias). En el rincón donde se asienta el conjunto de tinajas, la propietaria tenía el problema endémico de hongos por lo que el césped no mostraba hermosura ni reaccionaba a ningún tratamiento fúngico. El problema se solventó creando el conjunto que vemos sobre un mulching (acolchado) de corteza de pino.