En la cuenca mediterránea abundan los ejemplares de esta planta y además es fácil encontrarlas con flores prácticamente todo el año.
Ahora, en inverno y más en estos días de intenso frío, es cuando menos florece.
Es el momento ideal para realizar una poda de mantenimiento y así contener su tamaño y forma.
La parte coloreada de la planta no son las flores en sí, esas hojas de color que apreciamos son brácteas que rodean la verdadera flor, pequeña y blanca que está en su interior.
Hay buganvillas de brácteas de muchos colores: rosas, moradas, naranjas, blancas, etc.
Os dejo algunas fotos de esta buganvilla con la que participo en el proyecto de Guía de Jardín.