Y es que a veces uno proyecta-organiza-ejecuta todo tan rápido que en el revoleo siempre algo se te cae…o algo se te olvida…o simplemente no logra suceder.
Así de esta manera, pasó el primer cumpleaños de Simón, el primer año en este oficio de ser padres…
Y sucedió a puro color. Con el sol a pleno. En un lugar bellísimo, y con nuestros amigos y familia, que nos llenaron de mimos y presencia.
Nada mas lindo que el encuentro con aquellas personas que, de alguna manera, hacen mas fácil la vida. Sin esperar grades cosas. Tan solo compartir el aniversario de un momento, que no se repite, y que es especial para nosotros por que nos ha redefinido como personas.
Ahora, nos queda volver a nuestro cotidiano; para que este pequeño proyecto, que es el vivero en casa, prospere tiernamente como una semilla que germina.
Amigos, pronto buenas nuevas..
Saludos!
Bello Liquidambar luciendo sus hojas otoñales.
Una Lantana “toquedeada” (como dice un amigo)
Banderines de colores para Simon
Dando el ejemplo: reutilizando frascos de mermelada como floreros!