Es curioso que una planta que lleva mas de 1500 años de uso por sus magnificas propiedades y beneficios por un pueblo indígena sudamericano: “Los guaraníes o guachimis”, sea presentada en los últimos años al mercado, como una planta milagro que revoluciona nuestras vidas, y a veces también nuestra cocina.
Lógicamente el momento de la historia en que más generalizado está el consumo de alimentos dulces y cuando por primera vez la obesidad y la diabetes se han convertido en un problema de salud pública en buena parte del mundo, una planta como la stevia es una verdadera solución y de gran ayuda para estos casos.
posee enormes beneficios para nuestra salud
En la obesidad y la diabetes tiene un efecto regulador del páncreas, y por tanto, ayuda a mantener estables los niveles de azúcar en sangre. También es hipotensor, combate la acidez estomacal y los gases de la digestión, alivia las náuseas, mata la bacteria que provoca la gingivitis, previene la caries, tiene efectos beneficiosos frente a problemas de piel, es cicatrizante y favorece la concentración mental.
En los últimos años, la stevia, que algunas personas cultivaban en casa para consumo propio, se ha incorporado al mercado como edulcorante en sustitución del azúcar, la sacarina o el aspartamo, pero también ha empezado a usarse en mermeladas, dulces, helados. Veamos como hacer extracto casero de Stevia
Proceso para hacer extracto casero de Stevia
como hacer extracto casero de Stevia
Calentar 500 ml de agua mineral hasta casi alcanzar el punto de ebullición.
Retirar del fuego, verter todo en un tarro de cristal y añadir 25 gramos de hojas secas de stevia picadas finas (como si fuera un té verde).
Si no disponemos de una balanza para pesar, podemos usar la medida de una taza o de un vaso. Para 2 tazas o vasos, verter 1/4 de taza de stevia.
Cubrimos la infusión con una tapadera o papel de aluminio ajustado al vaso y la dejamos reposar toda una noche (mínimo 12 horas).
Colamos la infusión a través de un paño fino o colador de tela, sobre todo si hemos usado polvo. Tendrá un color oscuro verdoso. Dejarla reposar para que filtre bien cualquier residuo sólido y vertemos con cuidado el líquido para que no se mezcle con el poso, a fin de que no caiga polvo alguno.
Guardar en la nevera en una botellita u otro recipiente con cierre herméticamente, para evitar que coja otros olores del frigorífico.
Más o menos, una cucharada sopera de este extracto equivale a una cucharada de azúcar tamaño de café. Es normal que tenga como resultado un color verdoso o un poco pardo. Se conserva bien hasta 10-15 días, pero con el tiempo tiende a amargarse, por lo que debe consumirse antes de que pasen esas fechas.
La entrada original de La Stevia, cómo hacer extracto casero es de Vida Natural y Belleza
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