Lo primero que debes hacer para utilizar la grava en tus plantas es quitar todas las malas hierbas de la zona en la que vayáis a usar la grava y levantar una capa de tierra de 8 o 10 centímetros. En el desnivel que se haya formado debéis echar una mezcla entre gravilla y arena de rio hasta cubrirlo. Usad una pala para cavar los agujeros en los que vayáis a colocar vuestras plantas.
Luego, para utilizar la grava en tus plantas debes retirar las plantas de las macetas, asegurándoos de que el cepellón quede holgado cuando los instaléis en los hoyos. Después, rellenad los agujeros con la tierra extraída y aplanadlo hasta que quede firme y compacto. Poned encima una capa fina de grava hasta que se quede al nivel de la zona con gravilla. Por último, regad bien la zona.
¿Creéis que es buena la grava? ¿La vais a usar o la estáis usando ya?