¿Qué es un césped compactado?
La compactación de un césped (césped compactado) es la condensación mediante presión de las partículas del suelo resultando una masa de suelo más densa y con menos espacio de poros.
La compactación se produce principalmente por la utilización de dicha superficie y por el trasiego de maquinaria de mantenimiento (principalmente segadoras por su frecuencia).
Dicho tráfico genera dos problemas al mismo tiempo:
Por un lado desarrolla lo que se conoce por “pisoteo”, que son los daños generados al césped por el contacto directo sobre su superficie vegetativa. Comprenden aquellos daños producto del efecto de rasgar, arrastrar, rozar, aplastar o romper directamente la hoja, vástagos o las raíces al generar tráfico sobre el césped.
Por otro lado produce en el suelo sobre el que se sustenta el césped un efecto de compactación que altera considerablemente las condiciones en las que vive la planta. Vamos a ver cómo puedes mejorar un césped compactado …
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Pisoteo y Césped compactado
Mientras el pisoteo se caracteriza por tener consecuencias inmediatas y a corto plazo, la compactación es un proceso de degeneración a medio y largo plazo, con consecuencias a menudo no perceptibles, pero sin embargo de mayor gravedad y de difícil solución, dependiendo de la severidad de dicha compactación.
Por el contrario la capacidad de recuperación de un césped ante el estrés producido por el tráfico es mucho mayor, y una vez eliminada la causa del pisoteo y si se mantienen las condiciones necesarias para el desarrollo vegetativo, en pocos días se producen nuevas hojas y raíces, y nuevos vástagos que eliminan los daños.
La compactación por lo tanto es un estrés escondido y no produce un daño directo, pero sin embargo afecta indirectamente al desarrollo radicular y a la reducción del contenido de oxígeno en el suelo.
Por un lado tenemos el impacto de las gotas de agua durante la lluvia y especialmente del riego.
Diversos estudios han venido a significar que en un suelo desnudo las gotas de lluvia han aumentado en un 15% la densidad del suelo en los primeros 2.5 centímetros comparado con un suelo cubierto.
Se dice que una dosis habitual de riego son 6 litros/m2 y dia, esto supone un aporte de 6 Kg diario, o lo que es lo mismo 180 Kg mensuales por metro, esto supone una importante presión sobre la superficie y colabora con los procesos de compactación del suelo.
La naturaleza de este tipo de compactación tiene que ver con la textura del suelo. Aquellos suelos con alto contenido en arcillas son más susceptibles de compactarse. Durante la hidratación se expanden y al secarse se encogen formando grietas. Estas se rellenan de suelo superficial aumentando así su densidad.
Por otro lado tenemos el tráfico de personas que junto con el tráfico de maquinaria y vehículos es la principal causa de compactación..
Es por ello que aunque parezca que el tráfico de persona parece tener pocas consecuencias si lo comparamos al de las máquinas, la realidad es que la superficie sobre la que se reparte dicho peso es pequeña en el caso
de una pisada (apoyo con los pies) frente a las grandes ruedas usadas en la maquinaria. Este tipo de efecto es importante en aquellas zonas donde se concentra el paso.
Césped más denso, césped menos compactado
La presencia de colchón puede absorber y difuminar las fuerzas que provocarían compactación. Es de esperar por lo tanto que un césped más denso o segado con una altura de corte mayor será menos susceptible de compactarse con el tráfico.
A menudo se ha descrito la compactación como el principal problema en el mantenimiento de los céspedes.
Sin embargo rara vez se asocia a la compactación como la causa en la reducción del vigor, crecimiento, calidad o persistencia de los céspedes, principalmente porque no reduce directamente la actividad de la planta sino que actúa sobre factores que afectan indirectamente a dicha actividad, como por ejemplo la aireación del suelo, su dureza, la relación hídrica entre planta y suelo, o la temperatura de suelo.
Es por ello que a menudo a la compactación se le conoce como el estrés escondido.
Cómo y porqué afecta la compactación del césped a su crecimiento
Crecimiento y actividad radicular:
La compactación altera la distribución espacial de las raíces en el suelo provocando un aumento de las raíces más superficiales pero a la vez una reducción en el número de raíces profundas.
La respuesta de las raíces a la compactación es:
Un mayor número de raíces superficiales (debido a la dificultad mecánica para el crecimiento).
Una liberación de etileno que promueve el desarrollo de raíces adventicias.
Una reducción en el nivel de oxígeno del suelo (reducción general en el crecimiento radicular y en la absorción de agua por las raíces).
Decaimiento en condiciones de verano (por una mayor temperatura del suelo y un menor contenido en oxígeno).
Aumento de porosidad dentro de las raíces (aerenquima) para enmendar el deterioro de la capacidad de absorción de agua y oxígeno.
Reducción en la formación de pelos radiculares, y formación en general de raíces mas cortas y gruesas que en suelos no compactos. Crecimiento de la parte aérea:
Como se ha visto la compactación reduce el número de raíces profundas y posiblemente el número total de raíces.
Este hecho tiene consecuencias sobre la parte aérea de la planta, especialmente en los momentos en los que se ve sometida a cualquier tipo de estrés: calor, sequía, enfermedades…
Bajo compactación la producción de materia vegetal decrece en suelos arcillosos y francos pero puede incrementar levemente en los arenosos debido a la mejora de las condiciones de humedad.
Hay una reducción de la toma de nutrientes que parece ser consecuencia de la reducción del oxígeno en el suelo aunque no se sabe bien si es causo o efecto de la reducción del crecimiento vegetativo.
La reducción del crecimiento vegetativo es observable fácilmente midiendo la recogida de los restos de siega.
Se puede observar dependiendo del nivel de compactación, entre un 25 y un 50% de reducción de restos de siega.
En general la calidad del césped medida visualmente decrece ostensiblemente, produciendo un césped más fino y poco denso con una tasa de crecimiento menor. La tendencia en estos casos es a fertilizar y regar más para promover más crecimiento cuando lo que se consigue es incluso el efecto contrario.
Absorción de nutrientes:
La absorción de nutrientes se ha comprobado que se ve influenciada por la compactación. En general parece que el orden de reducción es el siguiente: K>N>P>Ca>Mg, mientras que el sodio parece aumentar hasta tres veces su absorción.
Para mejorar estos efectos negativos debemos fertilizar ligera y frecuentemente. Se ha observado en algunos estudios que la compactación bajo regímenes bajos de nitrógeno reduce la producción radicular en 13% mientras que la compactación bajo regímenes altos de nitrógeno reduce la producción radicular un 45%.
Con ello se demuestra que el manejo de los suelos compactados es difícil y se debe resolver poco a poco mediante aplicaciones ligeras de nutrientes para evitar un crecimiento que la planta no puede soportar.
Reservas de carbohidratos:
La cantidad de hidratos de carbono no estructurales, que forman parte de las reservas de la planta, son necesarios para el endurecimiento de la planta y la capacidad de recuperación ante cualquier estrés o daño.
Algunos estudios han venido a significar que los niveles de carbohidratos bajo estrés de compactación se mantenían normales durante los periodos más fríos mientras que a mitad de verano se observaba una reducción de hasta el 50% comparado con las plantas sin compactación.
Tolerancia a estrés medioambiental:
La reducción de reservas en forma de carbohidratos de plantas débiles, en conjunción con las condiciones que presenta un medio con propiedades físicas no adecuadas hace que las plantas sean más susceptibles a cualquier estrés añadido.
Incidencia de enfermedades
Muchas enfermedades son más incidentes en condiciones más húmedas y en suelos sin buen drenaje. Una vez la enfermedad ha infectado a la planta la severidad puede ser mayor y el poder de recuperación menor en condiciones de compactación.
Variación de la comunidad:
Cuando la compactación altera las propiedades físicas del suelo no todas las especies se ven igualmente afectadas.
Unas son más tolerantes a la nueva situación por lo que con la compactación variaremos el equilibrio natural de especies, empeorando la situación para unas pero favoreciendo la de otras que compiten mejor en estas circunstancias.
En céspedes la compactación favorece la proliferación de Eleusine indica (goosegrass), Polygonum aviculare y sobre todo de Poa annua, que invaden las zonas compactadas.
No solo esto sino que en una mezcla de especies cespitosas unas (Raigrass o Poa pratense) predominaran sobre otras (Festuca rubra o Agrostis capillaris).
Como prevenir la compactación del césped
¿Qué podemos hacer para prevenir la compactación de nuestros suelos?
Las prácticas culturales que podemos realizar para la prevención o la mejora de un césped compactado las podemos agrupar en:
Mejorar los suelos:
La mejor opción es usar suelos menos susceptibles de compactarse. Dado que las superficies deportivas se caracterizan por ser superficies permanentes y que reciben mucho tráfico, la utilización durante la construcción de suelos arenosos menos susceptibles de compactarse se considera práctica habitual, en particular en aquellas zonas de uso más intenso y que demanda condiciones más exigentes.
Aun así, en aquellos céspedes ya establecidos podemos añadir enmiendas poco a poco mediante recebados en superficie o para incorporarlos en los huecos del pinchado/escarificado. El uso de arenas y materia orgánica puede ser ejemplo de acondicionadores de suelo.
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Selección vegetal:
La selección de la especie, e incluso de la variedad, cuando sabemos que nuestro césped va a soportar mucho tráfico, es uno de los factores más importantes pues una mala elección nos traerá de cabeza toda la vida.
Es difícil sin embargo encontrar información sobre la tolerancia de las distintas especies a la compactación. En general las especies de clima cálido (especies C4) son más tolerantes que las de clima frío (especies C3).
Dentro de las segundas parece que pueden seguir esta relación de mayor a menor tolerancia: Poa annua, Lolium perenne, Poa pratensis, Festuca arundinacea, Agrostis tenuis, Festuca rubra …
Sin embargo otras factores suelen ser mas determinantes a la hora de seleccionar la especie a utilizar por lo que otro tipo de medidas son necesarias pare evitar la compactación.
Control de tráfico:
Un tráfico repetido y continuo sobre la misma zona se sabe que es muy perjudicial.
Por ello el control del tráfico en cuanto al tiempo (evitar momentos mas desfavorables como en verano, en condiciones de suelo saturado de humedad…), frecuencia (dispersar el tráfico lo mas posible, y tipo (utilizar vehículos ligeros y ruedas mas anchas, diseñar adecuadamente caminos, estradas y salidas…) es una de
las principales medidas para aliviar la compactación y sus consecuencias.
¿Que es el Aireado del césped?
En términos de manejo de césped, la aerificación es el arado del suelo sin alterar la superficie vegetal. Se puede realizar con diferentes métodos que describiremos mas adelante, entre los que destaca el pinchado, ya sea hueco o macizo.
La profundidad y separación del pinchado varía según las necesidades aunque no suele ser más profundo de 10 centímetros ni estar separado de más de 5 o 10 centímetros entre sí.
Debemos tener cuidado pues la verificación continua con medios mecánicos puede llegar a producir la compactación de la zona inmediatamente inferior a la profundidad habitual de pinchado, creando la conocida suela de labor.
Las distintas investigaciones realizadas sobre la efectividad de la aerificación para controlar o aliviar la compactación han reflejado que hay un gran número de factores afectando al proceso de descompactación entre los que se encuentran:
Tipo de suelo en cuanto a estructura y textura.
Humedad del suelo durante el pinchado.
Efectos a corto y largo plazo. Como norma general se puede decir que la compactación en suelos arenosos no suele ser un problema y puede que los pinchados no sean necesarios si se realiza un recebo adecuado (sin embargo el pinchado puede ser necesario por otros motivos distintos de la compactación, como la formación de capas en horizonte radicular del suelo).
Así mismo, el pinchado soluciona la compactación de forma bastante eficiente en suelos francos y franco arenosos.
En suelos pesados y fácilmente compactable (arcillas y limos) suele ser menos efectiva y sus beneficios se mantienen en muy corto plazo.
Objetivos al realizar el aireado del césped
Principalmente se aliviara la compactación del suelo. Con ello conseguiremos mejorar el intercambio gaseoso entre el suelo y la atmósfera, permitiendo la difusión del oxígeno necesario para la actividad radicular.
Así mismo se mejora la capacidad de infiltración y la percolación. La primera es necesario para la entrada del agua al suelo, evitando el encharcamiento y la escorrentía. La segunda es necesaria para retirar el exceso de humedad de la zona radicular liberando el agua a capas mas profundad.
Como consecuencia de todos estos mejoraremos el sistema radicular de la planta, no solo en cuanto a cantidad de raíces y aumento del crecimiento, sino que la cantidad de raíces profundas será mayor, por lo que aseguraremos una mejor adaptación a las situaciones desfavorables de estrés hídrico y falta de nutrientes. La raíces mas profundas podrán aprovechar mas centímetros de suelo donde tomar agua y nutrientes.
La aerificación en casi todas sus formas ayudan a controlar el colchón o thatch.
Siempre hay una pequeña cantidad de thattch que removemos con estas labores, con algunas más que con otras. Sin embargo las principales labores culturales para el control del colchón son el recebo, la siega (reduciendo la altura de corte) y el escarificado.
Puedes ver cómo se hace el escarificado en ➜ Cómo regenerar el césped. Escarificar el césped.
Si aireamos y rellenamos posteriormente con algún tipo de enmienda (arena, turba, compost, sulfuro, yeso…) poco a poco vamos modificando las características del suelo sobre el que mantenemos nuestro césped.
Mejora de la resiliencia. Esta se define como la capacidad que tiene el césped de recuperar su estado después de someterse a una acción o presión. Muchas de las medidas que se realizan para conseguir una buena
germinación de las resiembras son en realidad labores de aireación. No es raro usar escarificadore, pechadoras, gradas de disco, etc. para incorporar la semilla, atravesando el colchón, y conseguir un buen contacto semilla-suelo y por tanto su germinación
Regeneración del césped. Tanto los rizomas como los estolones se ven cortados induciendo nuevas yemas de crecimiento.
Penetración de fertilizantes y enmiendas. Aunque no consiga incorporarlas a profundidades grandes, la realidad es que a menudo es la única forma de añadir fertilizantes inmóviles (fósforo) y otras enmiendas (azufre, yeso, calcio…) por debajo de la superficie del césped, allá donde se necesita.
Inconvenientes del aireado
Sin embargo la labor de aireado no es fácil de realizar y son muchos los factores que tenemos que tener en cuenta.
Debemos ser conscientes de que puede tener efectos negativos por lo que deberemos ser cautos a la hora de
realizarla:
Las labores de aerificación afectan negativamente al césped, en unos casos más que en otros, dañando tanto la parte aérea de la planta (en el peor de los casos a la corona) como a las raíces.. Esto expone al césped a otro tipo de estreses haciéndolo mas susceptible de sufrir daños por condiciones extremas, en particular a las meteorológicas (calor, frío, desecación…)
La realización de estas prácticas culturales implica el uso de mano de obra especializada y de maquinaria que en muchos casos no es barata. Las máquinas suelen usarse pocas veces al año, y sin embargo es difícil encontrar empresas que las alquilen o que te hagan el servicio.
Cuando se realiza aerificación se suele fomentar la aparición de malas hierbas, aprovechando el hueco producido para germinar y establecerse. Es por ello que suele ayudar para prevenir este efecto el fertilizar con una semana de antelación para promover el crecimiento de nuestro césped y reponiendo el hueco lo antes posible. La fecha de realización de estas labores desgraciadamente coincide con lo periodos típicos de
germinación de plantas anuales, bien sean en otoño o en primavera. No suele ser adecuado realizarlas durante el invierno o el verano, pues estaríamos exponiéndolas a las condiciones meteorológicas mas adversas.
Los canutos que hacen las máquinas de pinchado profesionales, y otros restos de la aerificación deben manejarse con cuidado. Sin embargo es difícil recoger todos los restos y las máquinas de siega suelen verse afectadas. Las cuchillas suelen desgastarse rápidamente los días posteriores a la aerificación, especialmente en el caso de pinchados huecos que sacan a superficie una gran cantidad de suelo o arena.
Existe, como hemos comentado, el riesgo de elevar la compactación si realizamos los pinchados siempre a la misma profundidad, creando una suela de labor.
Aireado del césped + Recebado
La labor para mejorar la compactación del césped con el aireado debe ir siempre acompañada de un Recebado.
El Recebado es la operación por la cual aplicamos en la superficie del césped un volumen determinado de material, integrado generalmente por arena o arena y materia orgánica en unas determinadas proporciones, o solo materia orgánica, incluso tierra.
La aplicación de abono, normalmente abono orgánico, tras la realización de un aportarte adecuada de materia orgánica, de buena calidad, no suele ser necesario realizar otros tipos de abonado, limitándose con ello el uso de abonos químicos y la contaminación que estos produce.
El recebado también modifica la textura de la superficie: en caso de que la tierra inicial no sea de la calidad requerida, se consigue que poco a poco se vaya creando un nuevo suelo con textura diferente. Con el paso de los años podemos alcanzar una profundidad de suelo nuevo considerable y de calidad.
Con el recebo podemos aplicar enmiendas, ya sean nutritivas, como es el caso de la aplicación de fósforo inmóvil cuando queremos incorporarlo en la zona radicular, o bien correctoras de las condiciones del suelo (azufre, yeso, materia orgánica, ácidos húmicos…).
La labor de recebo se realiza bien aplicando capas de enmiendas a mano, lanzando con una pala la mezcla horizontalmente para que se distribuya lo mas homogéneamente, o bien de forma mecanizada.
Con referencia a las características del material de recebo, se debe cuidar que la textura no sea diferente a la del suelo existente, ya que se corre el riesgo de que se produzca una estratificación.
La superposición de capas de diferentes características físicas puede impedir el movimiento del agua, aire y nutrientes, etc, hacia las zonas más profundas del suelo no llegando al sistema radicular de la planta. La estratificación puede interrumpir procesos de descomposición en suelos húmedos ya que crea condiciones anaeróbicas produciendo la conocida capa negra o blacklayer.
El agua superficial se infiltra a través de una capa del suelo de buena textura desde la superficie, dirigiéndose hacia capas más profundas, donde se encuentra el suelo más arcilloso o pesado que no la deja drenar. En esta zona se presenta una falta de aire, donde las bacterias y microorganismos que descomponen la materia orgánica no pueden hacer nada. Apareciendo organismos anaeróbicos que lo desplazan y que no favorecen la degradación de la materia seca, produciendo un olor característico a ciénaga. Un modo de evitar este problema es airear y después rellenar los huecos realizados por el pinchado con material de recebo adecuado,
preferentemente arenoso.
Un saludo.