La flor de la pasión, passiflora o pasionaria de la familia passifloraceae es una planta notable por su sólido desarrollo, su fruto es delicioso y sus flores son bellas, únicas y estructuradas. Los primeros misioneros españoles que viajaron a Sudamérica, de donde es originaria la mayoría de las especies de esta planta, usaban las flores para ilustrar la historia bíblica de la crucifixión en su intento por llevar el cristianismo a los indígenas. El anillo de filamentos multicolor simbolizaba la corona de espinas; la columna que está en el centro de la flor, el poste de los tormentos; los estambres representaban las cinco heridas y así sucesivamente cada uno de sus rasgos fue tomado como símbolo de la pasión de Jesucristo.
Cuidados en primavera-verano
Passiflora caerulea
Cada año cambia la planta de maceta y llévala a un recipiente de mayor tamaño sin perturbar el sistema de raíces. Coloca con cuidado la masa de raíces en el resto de compost en el recipiente más amplio y llena con más compost. El tamaño del tiesto final debe ser de aproximadamente 25 cm; un espacio mayor puede estimular mucho más el crecimiento de la planta. A partir de ese momento, abona anualmente reemplazando la capa superficial (5 cm) con compost nuevo.
Los tallos de la pasionaria precisan apoyo. Las plantas jóvenes pueden parecer muy atractivas enrolladas alrededor de un aro de alambre; sin embargo, su pronto crecimiento logrará superar el aro y necesitará de muchas más estacas de bambú para que se sustente adecuadamente.
Poda la flor de la pasión para darle forma en la época en la que debas cambiarla de recipiente, cortando los brotes de flores hasta 20 cm y las ramas laterales hasta 5 cm. Mantenla a una temperatura de 18 °C a 27 °C en un lugar soleado y luminoso. Riégala al menos tres veces por semana para que el compost se mantenga húmedo todo el tiempo y evita poner el recipiente sobre otro con agua. Agrega un fertilizante líquido semanalmente entre los meses de primavera y verano.
Cuidados en otoño-invierno
Fruto de la passiflora
En el invierno tendrás que mantener la flor de la pasión de la especie caerulea a una temperatura de 10 °C y unos grados más para la especie coccinea y quadrangularis. Por otro lado, procura una buena circulación de aire, pero no expongas la planta a las heladas. Proporciona la mejor iluminación posible, incluyendo el pleno sol. Riégala de forma moderada.
Propagación
Toma esquejes del tallo de 8 cm en primavera, cortándolos por debajo de un nudo de hoja y retirando el par de hojas inferiores. Trata los extremos del corte con hormona de enraizamiento e insértalos hasta las hojas inferiores en una mezcla de arena gruesa y turba en partes iguales. Introdúcelos el recipiente plástico y mantenlos húmedos y a la sombra una temperatura de 18 °C a 21 °C.
Cuando el nuevo crecimiento se haga visible, aproximadamente a las tres semanas, lleva los esquejes a una posición mucho más luminosa, riégalos de manera ocasional y abona con un fertilizante líquido cada 15 días hasta que termine el período de crecimiento en otoño. Deja de abonar, riega de manera espaciada y mantén los esquejes a una temperatura de 10 °C a 13 °C en los meses de invierno. Luego, planta los esquejes entre el invierno y la primavera.
Problemas de la passiflora
Los tallos y el follaje de la passiflora suelen deshidratarse rápidamente y las hojas se caerán si la flor de la pasión se seca; las hojas se volverán amarillentas y la floración será completamente inexistente si la planta no cuenta con la luz solar adecuada.
No obstante, si le proporcionas las condiciones advertidas, la planta debería ir mejor. Si la arañuela roja llegara a atacarla, rocía con un insecticida que contenga malathion. Ten en cuenta que la cochinilla algodonosa, también conocida como cotonet, puede ser un problema, por lo que deberás eliminar los montecillos blancos con ayuda de un algodón mojado con metílico o rociar con un insecticida que contenga malathion. Por otro lado, trata el pulgón verde con un insecticida base de piretrina.
Especies de passiflora
Passiflora quadrangularis
Passiflora coccinea
Passiflora caerulea: es una de las especies más conocidas y puede llegar a alcanzar una altura de 6 m o más. Las plantas de interior precisan una poda drástica para dotarlas de una forma manejable. Los tallos son resistentes y de color verde oscuro y lucen unas hojas brillantes lobuladas. Sus flores son de 8 cm de anchura en forma de salsera durante todo el verano. La estructura de las flores de la passiflora caerulea es intrincada, con pétalos gris blanquecino dispuestos alrededor de una corona de filamentos delgados de varios colores.
Passiflora coccinea: esta variedad de passiflora puede llegar a trepar y alcanzar los 6 m como la especie mencionada anteriormente. Sus flores son muy bellas y pueden tener una anchura de 10 a 13 cm que aparecen durante los meses de verano en un color escarlata.
Passiflora quadrangularis: es una planta trepadora que probablemente precisará un invernadero con calefacción para poder prosperar. Tiene flores de 8 a 10 cm de anchura que se desarrollan durante los meses de verano.
Te recomendamos leer:
Conozcamos la variedad insecticidas que debería tener el aficionado a la jardinería
Características y cuidados del helecho plumoso