Mi pequeño monstruíto ;) tiene ya siete años, así que creo que es el momento de enseñarle a cuidar y apreciar el medio ambiente, de una forma divertida pero que también entrañe algo de responsabilidad.
En un principio pensé en escoger alguna llamativa que le gustara de mi jardín y dársela, sin embargo, después de meditarlo un rato he llegado a la conclusión de que, si quiero que este proyecto llegue a buen puerto, lo mejor será pensar cuidadosamente qué especie será la mejor, atendiendo a una serie de cuestiones.
(Imagen: Pixabay)
¿Pero qué cuestiones? A continuación consejos de plantas ideales para niños:
1. Bien, en primer lugar y casi lo más importante, la resistencia de la planta. Jamás se nos puede ocurrir regalar una Aphelandra, un Adiantum o Caladium. No obstante, existen algunas plantas de muy fácil cuidado que no harán que se desanimen a la mínima.
Os recomiendo la Sansevieria, espada de San Jorge o lengua de suegra, una planta procedente de África y Asia que se cultiva de forma estupenda en el interior del hogar. Especialmente la Sansevieria trifasciata que es muy, muy fuerte y soporta ambientes secos y calientes, una iluminación escasa o la falta de riego.
(Imagen: Wikimedia)
Si tus niños son pacientes (mi nieto no, ni un poquito...) podéis optar por la Aspidistra, una planta asiática que se adaptará a la perfección tanto al interior como al exterior de tu hogar. La resistencia de la pilistra, como comúnmente se la conoce, es sorprendente, resiste la sequedad, se puede desarrollar en lugares semioscuros o umbríos, no requiere excesivos cuidados... ¡Un chollo!
(Imagen: Wikipedia)
2. Una actividad entretenida y didáctica para realizar sería recolectar semillas y plantar la especie con ellos. En este caso debemos fijarnos en su fácil reproducción.
Para reproducir la Begonia rex, por ejemplo, tendremos que seguir estos pasos:
- Compramos una maceta pequeña e introducimos sustrato específico para semilleros.
- Cogemos las hojas de nuestra planta y cortamos el peciolo desde la base, reduciendo la hoja a la mitad de su tamaño.
- Introducimos la hoja en el sustrato presionando, más o menos en la mitad del contenedor.
- Regar en abundancia.
- Colocaremos un recipiente de plástico, boca abajo, para mantener la humedad lo mejor posible.
(Imagen: Wikipedia)
O, si no extremadamente sencilla, por lo menos curiosa. El papiro es una planta acuática, seguro que le encanta ver cómo se reproducen este tipo de plantas. (En este post encontrarás información sobre la reproducción del papiro).
(Imagen/ Flickr: docnavarro)
Regalando una planta a los pequeños de la familia podremos enseñarles muchísimas cosas: los tipos de semillas (elegir plantas comestibles también es una buena opción), los tipos de crecimiento, sus necesidades...
Es una lección de responsabilidad y respeto, y una muestra de amor hacia ellos y a la naturaleza. ¡Qué vivan las plantas!