El drago canario es un superviviente. Se toma su tiempo para crecer, aprovechando su energía en hacerlo cuando las condiciones lo permiten; y tanto sus hojas como su tronco y raíces le permiten resistir la sequía sin problemas.
Son estas las cualidades que hacen que su cultivo haya llegado hasta aquellas regiones donde las precipitaciones son muy escasas, y donde el sol aprieta con fuerza en verano.
¿Cómo es el drago canario?
Imagen – Wikimedia/PuusterkeNuestro protagonista es un árbol que encontraremos silvestre en las Islas Canarias, y en el oeste de Marruecos. Su nombre científico es Dracaena draco, y es una planta que mide una altura máxima de 18 metros, aunque crece muy lentamente. De hecho, puede tardar una media de diez años en alcanzar el metro de altura. También tarda en ramificar: empieza a hacerlo después de florecer por primera vez, más o menos a los 15 años de edad.
Su copa está formada por ramas gruesas de las que brotan hojas alargadas, con textura coriácea, de color verde grisáceo o glauco, y con una longitud de hasta 60 centímetros. Sus flores son blancas y brotan en racimos que mueren al terminar la floración.
¿Para qué sirve?
En el pasado, los aborígenes creían que era un árbol mágico, ya que la savia pasa a ser roja cuando entra en contacto con el aire, de ahí que reciba el nombre de »sangre de drago». Una vez la secaban y la convertían en polvo, la usaban como si fuese medicinal, para curar hemorragias y úlceras, e incluso para limpiarse los dientes.Hoy en día, sin embargo, su uso más extendido es el ornamental. Aunque crece muy lentamente, es una planta preciosa ya desde joven. Durante sus primeros años se suele cultivar en una maceta, por ejemplo en patios y terrazas; y más adelante, normalmente cuando ya empieza a tener tronco, se planta en el suelo.
Además, es el símbolo vegetal de la isla de Tenerife, donde podremos encontrar un ejemplar que tiene entre 500 y 600 años, en concreto en el municipio de Icod de los Vinos.
¿Cómo se cuida la Dracaena draco?
Imagen – Wikimedia/Frank VincentzEl drago es una planta muy agradecida. No se ha de regar con tanta frecuencia como otros árboles, aguanta el calor como pocos y no suele tener plagas ni enfermedades. Pero ojo: para que esté bien es muy importante que reciba los cuidados que precisa, teniendo en cuenta las condiciones en las que se cultiva.
Así que vamos a ver primero qué necesita para crecer:
Sol directo: es lo mejor. Yo he visto algunos ejemplares en semisombra en la isla de Mallorca, pero los más bonitos están siempre expuestos al astro rey de forma directa, durante todo el día.
Tierra ligera con excelente drenaje: recordemos que las Islas Canarias son islas volcánicas, con lo cual, el suelo permite a las raíces recibir el aire que necesitan para respirar sin dificultad. Además, el drago no tolera el exceso de agua.
Humedad ambiental alta: vive en islas y cerca de la costa, lugares donde la humedad del aire es alta. En aquellas zonas donde sea baja, las puntas de las hojas se pondrán marrones con rapidez, y podrían caerse.
Agua, pero sin pasarse: si está en maceta sí hay que estar pendientes del riego, pero un ejemplar que lleve en el suelo más de dos años no necesitará tanta agua.
Clima cálido: lo ideal es que no haya heladas nunca, pero puede soportar hasta los -2ºC sin sufrir daños. Quizás aguante hasta los -3ºC si se planta en una zona muy protegida, como puede ser en una esquina del jardín, o rodeado de plantas que le hagan un poco de cortavientos. En el caso de que el invierno sea más duro habrá que tenerlo en casa.
Y dicho esto, pasemos ahora a hablar sobre los cuidados que hay que darle a nuestro drago canario.
Ubicación
Lo más importante es buscarle un sitio en el que el sol le dé de manera directa. Pero si va a estar en el suelo, también se debe de tener en cuenta las dimensiones adultas que llegará a alcanzar. Por ello, se debe plantar como mínimo a una distancia de tres metros de muros o paredes, ya que así no habrá peligro de que rocen sus ramas con ellas a medida que crezcan.Tierra o sustrato
En maceta: podemos usar sustrato para suculentas (en venta aquí), poniendo una primera capa de arlita o grava volcánica para que el drenaje sea mejor.
En el jardín: la tierra debe ser ligera. Crece en suelos calizos si drenan bien el agua, pero antes de plantarlo se aconseja hacer un agujero de plantación de unos 50 x 50cm (como mínimo) y llenarlo con una mezcla de turba con perlita a partes iguales.
Riego y humedad
Imagen – Wikimedia/Falk2El riego del drago será, en general, escaso. Para no correr riesgos innecesarios, se le echará agua solo cuando la tierra se seque, y siempre y cuando no haya previsión de lluvias en los próximos días. Tolera la sequía.
Si hablamos de la humedad del aire, si vivimos en una zona donde es baja (es decir, que se mantiene por debajo del 50% siempre), será muy aconsejable pulverizar sus hojas una vez al día en verano. El resto del año, dado que es cuando el riesgo de pudrición es más alto, es preferible colocarle alrededor recipientes con agua.
Poda
No aconsejo podarlo. Realmente no lo necesita. Lo que sí podemos hacer es ir quitándole las hojas secas.Plagas y enfermedades
Es muy resistente a las plagas. De hecho, es difícil que tenga salvo que el ambiente sea muy seco, en cuyo caso quizás le afecte alguna cochinilla, pero nada serio.Pero sí es sensible a las enfermedades fúngicas, es decir, las transmitidas por hongos. Para ser más precisos, le pueden afectar el fitóftora, el fusarium y la cercospora. Pero como a todo hongo, a ellos les favorece el exceso de agua, y más si se combina con una humedad ambiental o del aire alta, de modo que se pueden evitar si se riega solo cuando sea necesario, y si se planta en tierras ligeras, que drenen bien el agua.
Cuando no se detectan a tiempo, los síntomas que veremos son básicamente dos: manchas amarillentas en las hojas primero, y necróticas después. El tronco se puede volver blando debido a la gran acumulación de agua, y sus raíces se pudrirán. A la menor sospecha, se debe de tratar con fungicida sistémico (como este), y cambiar la tierra si no es la más adecuada.
Trasplante
En primavera. Si está en maceta, se cambiará cada 4 o 5 años si las raíces ya asoman por los agujeros de drenaje.Multiplicación
Imagen – Flickr/Salomé Bielsa // Frutos verdes de drago canario.El drago canario se multiplica por semillas a lo largo de la primavera y el verano. Necesitan calor para germinar, y un sustrato arenoso que pese poco. Eso sí, hay que tener paciencia ya que pueden tardar dos o tres meses en brotar.
Otra forma es por esquejes, también en primavera. Se corta una rama, y luego se deja secar la herida una semana en una zona protegida. Y por último se planta en una maceta, en semisombra hasta que le veamos crecimiento nuevo, que será cuando se pase a un lugar soleado.
Rusticidad
Hasta -2ºC de mínima, y hasta 40ºC de máxima. Si en nuestra zona las heladas son más intensas, se tendrá en casa, en una habitación en la que entre mucha luz natural.¿Qué te parece la Dracaena draco? ¿Te gusta?