Esta semana ha sido un poco más corta de lo habitual, porque el lunes fue festivo, pero queremos seguir avanzando en nuestra renovada sección de frutas con un nuevo artículo donde os descubriremos la historia, el origen y las propiedades del physalis, también conocido como fisalis, alquequenje o farolillo chino. Si te pica la curiosidad por saber más sobre esta fruta exótica, tan rara pero tan común a la vez, acompáñanos en nuestro artículo.
Para empezar a descubriros el physalis o alquequenje, tenemos que decir que se trata de una planta de la familia de solánaceas, la misma a la que pertenece el tomate, ¡sí!, el tomate. De hecho, al physalis también se le llama comúnmente ‘tomatillo’, ya que el fruto es muy parecido al de la tomatera, aunque está protegido por una especie de hoja o cáscara que proviene del cáliz de la planta.
El origen de esta fruta está en América del Sur, donde los Incas eran expertos en su cultivo y los españoles lo trajeron a Europa posteriormente, aunque en pocas zonas se dan las condiciones climáticas para su cultivo. En España, hay alguna pequeñas partes del norte y del sur de la península donde se produce el physalis o fisalis.
El sabor del alquequenje es dulce como el de la mayoría de frutas, aunque tiene un toque ácido, por lo que sus usos en la cocina son más variados de lo que podemos pensar. El fisalis se usa como postre y en repostería, en bebidas, para hacer mermeladas, jaleas, además de en ensaladas, en crudo y también como simple elemento decorativo de los platos de nuestra gastronomía.
En cuanto a su composición, el physalis es algo diferente a otras frutas, ya que contiene menos agua, alrededor del 80 % del total, y más hidratos de carbono, aproximadamente un 14 %. La fibra también está bien presente en el alquequenje con un 5 % del total, las proteínas son escasas y las grasas prácticamente nulas.
En el apartado de vitaminas, destacan sobre el resto la vitamina A y C, que consumiendo solo pequeñas cantidades de fisalis, pueden cubrir perfectamente las necesidades diarias de estas vitaminas en nuestros organismos.
El mineral que más presencia tiene en el physalis es el fósforo, que presenta niveles muy altos, y el calcio. El hierro también aparece en menor cantidad.
Por último, vamos a hablar de sus propiedades medicinales y beneficios para la salud. Se trata de una fruta exótica antioxidante, rica en carotenos, y con propiedades de fortalecimiento del sistema inmunitario y de la vista. Además, el fisalis es una fruta diurética, que actúa de forma beneficiosa en el aparato digestivo, y con propiedades de purificación de la sangre y de ayuda en la reducción del colesterol.
Como veis, el fisalis, alquequenje o farolillo chino es una fruta exótica bastante desconocida, pero que por sus propiedades medicinales, beneficios para la salud y usos en la gastronomía, debería ser mucho más utlizada en nuestra dieta.