Esta ventaja repercute en el bienestar del medio ambiente, pero también en la propia salud de los que se bañen en la piscina, ya que los productos químicos que se utilizan en el mantenimiento resecan la piel. En este tipo de piscinas naturalizadas no es necesario utilizarlos, ya que son las plantas las encargadas de depurar el agua.
¿Qué es una piscina naturalizada?
Las piscinas naturalizadas son lo más parecido que hay a nadar en un lago o un arroyo, ya que por el modo de construcción que han seguido, recrean el entorno de estos ambientes. Para montar una piscina naturalizada hay que tener en cuenta que una buena parte del espacio se destinará a la zona de filtración, en la que se colocarán las plantas junto con la grava y la arena. Uno de los requisitos imprescindibles en la construcción de una piscina naturalizada es destinarle, al menos, 40 metros cuadrados. De esos, sólo la mitad estará destinada al espacio para nadar. Los otros 20 metros (como mínimo, sea cual sea el tamaño final de la piscina) serán la zona dedicada a la regeneración. Además, mediante tuberías se pueden imitar los ciclos que seguiría el agua en un paraje natural. Así, se pueden construir cascadas e incluso olas.
¿Qué plantas elegir?
Si decides construirte una piscina naturalizada, tienes que escoger las plantas que colocarás en la zona que no está destinada al baño. La única exigencia es que sean plantas que soporten bien el clima y el tipo de tierra que tienes en tu jardín, por lo que tampoco complica tu elección de construir una piscina naturalizada frente a una tradicional. Junto a las plantas crecerán los microorganismos que se encargarán de regenerar el agua.Al tratarse de agua que se depura con plantas, es muy fácil que durante los primeros días adquiera un color verdoso, pero eso no implica que el agua esté sucia. También por ese motivo puede atraer a anfibios, pero nunca estarán en la zona de baño. A veces, los dueños de estas piscinas deciden criar peces en su área de regeneración: esto puede hacerse siempre que haya un filtro que impida su llegada a la zona de baño.
¿Por qué son ecológicas?
La construcción de una piscina naturalizada suele costar lo mismo que la de las piscinas tradicionales, pero con el tiempo resulta mucho más económica, ya que no hay que gastar en los productos para el mantenimiento, que además, perjudican al medio ambiente, ya que se trata de productos químicos. ¿Cómo se mantiene una piscina naturalizada?
Como ya hemos dicho, este tipo de piscinas no requieren el uso de productos químicos para su mantenimiento. Lo único que hay que tener en cuenta es que, durante el verano, el agua llegue a las plantas que cubren el borde para que puedan seguir llevando a cabo su labor. En otoño hay que ocuparse de quitar las hojas que puedan caer al agua para que no lo ensucien, y en invierno se debe evitar la congelación del agua.Imágenes: Casa do Ercilio, Fabio Panico, Ivogomes, Alvaro Oporto, Triángulo del Café, de Flickr.com