Introducir a los peques en el cuidado de las plantas es una forma maravillosa de fomentar su aprecio por la naturaleza y enseñarles responsabilidad.
En esta nota hablaremos de los beneficios que tiene que los cuiden plantas y una guía de como un peque puede cuidar
Entre las muchas opciones de plantas, el girasol destaca como una opción ideal para los pequeños jardineros. No solo son fáciles de cuidar, sino que su rápido crecimiento y tamaño impresionante pueden captar y mantener el interés de los niños.
Beneficios de que los niños estén en contacto con plantas
Conexión con la naturaleza: cuidar de las plantas ayuda a los niños a desarrollar una conexión temprana y profunda con el medio ambiente y les enseña el valor de la conservación.
Responsabilidad: aprender a cuidar de una planta enseña a los niños sobre responsabilidad y las consecuencias de sus acciones o inacciones.
Ciencia en vivo: observar el crecimiento de una planta desde la semilla hasta la floración es una excelente lección de biología en tiempo real.
Paciencia y atención: las plantas crecen a su propio ritmo, lo que puede enseñar a los niños el valor de la paciencia y la observación detallada.
Bienestar emocional: La jardinería puede ser una actividad relajante que reduce el estrés y mejora el bienestar emocional de los niños.
Guía práctica para cuidar de un Girasol
Los girasoles son ideales para niños debido a su crecimiento rápido y visiblemente gratificante. Además, la posibilidad de cosechar sus semillas al final de la temporada añade otra actividad educativa.Paso a Paso
Elección de la semilla: dejen que el niño elija entre diferentes tipos de semillas de girasol, desde las variedades gigantes hasta las enanas.
Siembra:
Tiempo: primavera, después de la última helada.
Cómo: deja que el niño cave un hoyo de unos 2-3 cm de profundidad y coloque la semilla. Cubrir con tierra y regar suavemente.
Ubicación: los girasoles necesitan estar en un lugar donde reciban sol directo durante la mayor parte del día. Ayuda al niño a elegir el mejor lugar en el jardín o en un recipiente grande si viven en un departamento.
Riego: enseña al niño a regar la planta regularmente, manteniendo el sustrato húmeda pero no encharcada. Es una oportunidad para enseñar sobre el exceso de agua y sus efectos.
Observación y cuidados: motiva al niño a observar la planta cada día, notando cambios y crecimiento. Discutan sobre cómo las plantas necesitan luz solar y agua para crecer.
Apoyo: a medida que el girasol crezca, puede necesitar soporte. Ayuda al niño a colocar un tutor junto a la planta y amarrarla suavemente para evitar que se doble.
Cosecha: al final de la temporada, muestra al niño cómo recolectar semillas de su girasol. Pueden secarlas para plantar el próximo año o como un snack saludable. Iniciar a los niños en el cuidado de las plantas con girasoles es una excelente forma de enseñarles sobre la naturaleza, la ciencia, y la responsabilidad de una manera divertida y gratificante. Además, al cuidar de una planta, los niños no solo aprenden sobre jardinería, sino que también cultivan un sentido de admiración y respeto por el medio ambiente.
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