¿Por qué se ponen amarillas las hojas de las plantas?

Tienes plantas en casa o has comprado una hace poco, y te das cuenta luego de un tiempo que las hojas se están poniendo amarillas. No entres en pánico, ni tires la planta, ¡esto tiene solución! 

Que las hojas de nuestras plantas ya sean de interior o exterior se pongan amarillas es algo normal que suele suceder. La aparición de manchas amarillas normalmente se da por algún factor externo que está afectando directamente al desarrollo de tu planta.

   

Hojas amarillas o marrones en las plantas: Causas y como tratarlas

 



 

Posibles causa de las hojas amarillas en las plantas

  Primero lo que debemos saber que la aparición de machas o puntos  amarillos en las hojas se llama clorosis. Se puede dar por muchas razones, esto aparece cuando la planta no tiene suficiente clorofila, que es básicamente los nutrientes que genera la planta para nutrirse, es la responsable de la fotosíntesis y es la causa del color verde de las plantas. 

Es importante detectarlo a tiempo, porque puede afectar directamente a la salud de tu planta, inclusive pudiendo matarla. Las posibles razones de la clorosis pueden ser las siguientes: 

 

Ciclo natural de las plantas

  Puede que sea la razón más obvia, pero como todos los seres vivos, las plantas también tienen un ciclo de vida. Muchas variedades por naturaleza pierden hojas en verano o invierno. Así que no debemos alarmarnos cuando veamos hojas amarillas en nuestras plantas, simplemente puede que sea por un proceso natural. 

Para poder tener claro que esta es la causa, debemos tener un poco más de información de la planta que tengamos en casa. Puedes encontrar todo lo que necesitas sobre el mundo de las plantas en nuestro Blog de Urbangreen.

 

Riego inadecuado

  Puede que sea una de las causas más comunes entre todos nuestros clientes, esta se puede detectar fácilmente. Cuando observamos que todas las hojas de nuestra planta o las puntas de las hojas amarillas, puede que la estás regando demasiado. 

Tenemos que saber que las diferentes variedades de plantas tienen diferentes necesidades hídricas, con esto queremos decir que no es lo mismo la frecuencia de riego de un cactus a la frecuencia que necesita una Calathea. 

Ojo! tan malo es regarlas poco, como regarlas en exceso. Para detectar cada caso, si notamos que el sustrato de tu planta está húmedo y las hojas se ponen amarillas, claramente tenemos que bajar la frecuencia del riego. En cambio si la tierra está seca, seguramente tu planta esté necesitando agua urgente.

 

Problemas de drenaje

  A veces el principal problema no es la frecuencia del riego de nuestra planta, si no el drenaje del sustrato. Para controlarlo, debemos tocar la tierra de nuestra maceta, si notamos que está muy húmeda y compacta, puede que el problema sin dudas sea del drenaje. 

No detectarlo a tiempo puede causar que las raíces de nuestra planta se debiliten y probablemente muera, si ya hemos observado que este es el problema, tenemos dos opciones para considerar. La primera es dejar de regar un tiempo, y luego bajar la frecuencia. Y la segunda opción es trasplantar con sustrato nuevo, esto es necesario si notamos que nuestra planta está muy debilitada.

 

Mala iluminación o ubicación de la planta

  Depende de la variedad que tengamos en casa, muchas necesitan de luz solar directa o indirecta para poder realizar adecuadamente la fotosíntesis. Si observamos que las puntas de nuestra planta o las hojas se vuelven de un tono marrón progresivamente, claramente nuestra planta no está en el mejor lugar. 

Como decíamos antes debemos tener bien en claro cuál es la variedad de nuestra planta para poder saber que necesidades de luz tienen. También el exceso de luz para muchas variedades puede ser muy perjudicial. 

Una vez tengamos bien en claro esto dependiendo si nuestra planta está recibiendo mucha o poca luz, podemos cambiarla de lugar según sus necesidades.

 

Tierra con falta de nutrientes

  Es clave para mantener fuertes y sanas nuestra plantas un sustrato con los nutrientes que necesita. La falta de hierro, potasio, fósforo o nitrógeno puede ser una de las principales causas de que las hojas de las plantas se vuelvan amarillas. Es por eso siempre recomendable utilizar una tierra rica en nutrientes y ayudar a tu planta con algún tipo de complemento. Puedes consultarnos en los comentarios, que variedad tienes en casa y que problema tiene, así podremos ayudarte. 

Es una causa que es un poco más difícil de averiguar pero nuestros maestros jardineros seguro que podrán ayudarte. Si estás pensando en trasplantar, aquí te recomendamos unos de nuestros sustratos recomendados para cada tipo de planta:

   

Enfermedades o plagas

  Esto sin dudas nos dará un poco más de trabajo, y tenemos que tratar la plaga o enfermedad de formas diferentes en cada uno de los casos. No debemos descartar que este sea el problema de la aparición de hojas marrones o amarillas en nuestras plantas. 

En casos como los nematodos (gusanos microscópicos) u otro tipo de enfermedades, podemos tratar la planta con algún fungicida. Aunque siempre recomendamos tratar de identificar cual es la enfermedad o plaga que la está atacando para poder tratarla correctamente.

 

Temperaturas no recomendadas o corrientes de aire

  Esta causa va de la mano con la ubicación, todas las plantas necesitan adaptarse al ambiente donde las coloquemos. En muchos casos son lugares de temperaturas muy altas cuando la planta no lo necesita, o lugares de bajas temperaturas o mucha corriente de aire. Todos estos factores pueden afectar mucho a la adaptación de la planta y estresarla, lo que suele causar la aparición de decoloración de sus flores y hojas amarillas entre otros síntomas. 

Si ves que tu planta está en una zona de mucha corriente de aire, cerca de un aire acondicionado o una calefacción, quizás sea una buena idea cambiar de ubicación.

 

Consejos y remedios caseros para las hojas amarillas en las plantas

  Es muy importante para poder evitar y tratar este problema conocer muy bien las características de la planta que tenemos y sobre todo detectarla a tiempo. Esto es esencial para poder devolverle la vitalidad y evitar la aparición de las hojas amarillas en las plantas. Por cada posible causa que hemos explicado existen infinidad de productos y remedios caseros que puedes consultar en nuestro blog de Urbangreen. A continuación te vamos a dar un par de consejos para que tengas en cuenta para prevenir este común problema:

Controlar la frecuencia del riego:  Cada planta tiene necesidades diferentes de riego, lo primero es reconocer nuestra variedad y saber que hidratación necesita. Un consejo que siempre damos es que siempre es mucho más fácil recuperar una planta que hemos regado poco que una que hemos ahogado. Ninguno de los casos es bueno pero a veces el exceso de agua puede pudrir las raíces y lamentablemente ya será muy tarde. 

Uso de Abonos, si es necesario. A veces podemos ayudar a nuestra plantas con algún complemento como abonos o vitaminas para nuestras plantas. Pero ojo consulta primero y nunca te excedas en el uso, ya que puede ser muy malo. 

Fungicidas, si notamos que estamos en presencia de alguna plaga o enfermedad en nuestra planta, es recomendable utilizarlos en la medida justa. Existen un montón de remedios caseros, pero para ello hemos hecho otro artículo que puedes ver de ¿Cómo hacer un fungicida casero?

Ubicación de la planta, presta mucha atención a la cantidad de luz que necesita, si es de interior o exterior y no las expongas a corrientes de aire. Sobre todo en las plantas de interior es muy sencillo cambiarlas de lugar, así que si percibes que este es el problema no dudes en buscarle otra ubicación para tu planta.