Sin embargo, su cultivo no causa muchos problemas y es considerada como una planta bastante resistente dentro de las plantas crasas o suculentas.
Si quieres disponer de una planta de este tipo con tallos alargados que incluso pueden medir varios metros, la conocida comúnmente como burrito es la que más te puede llamar la atención.
En este artículo te contamos cuáles son sus principales características y la forma correcta de cultivarla. ¡Adelante!
Características de Sedum morganianum
Aunque no te suene nada por las fotos, Sedum morganianum es una suculenta bastante común original de la zona sur de México y Honduras. Una planta que es capaz de almacenar mucha agua entre sus hojas, siendo éstas muy gruesas y carnosas y formando agrupaciones que le han ganado el mote de cola de burro o burrito.Una de las bondades de este tipo de especies es que, además de ser muy agradecida en cuanto a los cuidados, la consideramos como planta colgante debido a sus largos tallos y, además, es una planta resistente y que necesita pocos cuidados.
Sus tallos son alargados, teniendo una longitud media de unos 40 cm, aunque si no se podan, pueden superar el metro de longitud. Además de sus hojas, esta suculenta también produce flores en los meses de primavera y verano, siendo de color rosado y apareciendo en la parte final del tallo.
Como ya puedes imaginar, el principal uso de Sedum morganianum es ornamental, pudiendo utilizarse como planta de exterior o interior, prácticamente cultivada en macetas.
El género Sedum engloba hasta 350 especies de plantas crasuláceas que crecen en zonas templadas. Entre ellas puedes escoger opciones muy vistosas como las siguientes:
Sedum spectabile
Sedum album
Sedum dasyphyllum
Sedum confusum
Sedum moranense
Sedum rubrotinctum
Sedum pachyphyllum
Sedum dendroideum
Sedum sieboldii
Sedum spurium
Sedum palmeri
Sedum acre
Sedum clavatum
Nombres comunes: cola de burro, burrito, cola de borrego, trenza de gitana, trenza de india.
Cuidados de la planta Sedum morganianum (cola de burro)
La planta cola de burro es considerada sencilla de cultivar. No requiere mucho mantenimiento y únicamente hay que prestar especial atención a la dosificación de los riegos y a la ubicación.Ubicación y climatología
La mayoría de las especies crasas están acostumbradas a crecer a pleno Sol, pero para evitar la pérdida del verdor original es recomendable ubicarla en una zona de semisombra. Es muy importante que tenga buena disposición a la luz, pero no tanto a Sol directo.En cuanto a temperaturas, prefiere entornos cálidos, pero soporta temperaturas bajas hasta los 5 ºC, aunque detiene su crecimiento.
Sedum morganianum se puede ubicar tanto como planta de interior como planta de exterior, en balcones y terrazas. En interior, la ubicaremos en la zona más luminosa de la casa, pero sin Sol directo. En exterior, la protegeremos del frío en invierno y en zona iluminada y semisombra.
Tipo de suelo o sustrato
La mayoría de las plantas suculentas no requieren mucha agua y necesitan sustratos con alto drenaje. El mayor problema de estas especies es la asfixia radicular.Por ello, si cultivamos Sedum morganianum en macetas, elegiremos un sustrato muy drenante, específico para este tipo de plantas.
Si queremos hacerlo de forma casera, es importante mezclar a partes iguales sustrato universal con arena o sustratos porosos como perlita o vermiculita.
Si cultivamos cola de burro en el suelo, buscaremos que tenga una textura franca-arenosa y aportaremos materia orgánica para mejorar su oxigenación.
¿Cada cuánto trasplantar Sedum morganianum?
En general, la planta desarrolla tallos largos no tanto en ancho, por lo que no necesitaremos realizar muchos trasplantes salvo que la maceta se quede algo pequeña y enseñe las raíces por la paret inferior.Al ser una planta colgante, podrás ver fácilmente si sus raíces empiezan a asomar por los orificios de la maceta o incluso sobresalen, momento en le cual se recomienda realizar un trasplante y un recorte de raíces.
Para ello, limpia las raíces de sustrato con mucho cuidado utilizando un cepillo o rastrillo, elimina las oscuras o envejecidas y recorta aquellas excesivamente largas. A partir de aquí, podrás realizar el trasplante a una nueva maceta, sustituyendo el sustrato y procurando que tenga suficientes agujeros para garantizar un drenaje excelente.
La operación del trasplante es recomendable hacerla a principios de primavera.
Riego y abonado
Las plantas crasas como Sedum morganianum necesitan riegos con buena separación, dejando el sustrato completamente seco entre cada riego. Este tipo de plantas son capaces de almacenar mucha agua en sus hojas y ser tolerantes a la sequía.Lo más importante es no pasarse con el agua, alargar la frecuencia y evitar que el agua se acumule en el sustrato, pues supondrá la muerte de la planta.
Una frecuencia aproximada de riegos puede ser la siguiente:
Riegos en primavera y verano: 2 a 3 riegos por semana con un volumen de 1/4 parte de la maceta.
Riegos en otoño e invierno: 1 riego por semana con un volumen de 1/4 parte de la maceta.
En cualquier caso, adapta la frecuencia a la climatología de tu zona, procurando que se seque el sustrato entre riego y riego.
En cuanto al abonado, le sienta muy bien aportar fertilizantes líquidos o abonos sólidos granulados a inicio de primavera. También encontrarás fertilizante para suculentas.
Multiplicación de Sedum morganianum
Obtener nuevas plantas de Sedum morganianum es realmente sencillo mediante la técnica de esqueje. Sin embargo, en este tipo de plantas suculentas es aún más fácil.Esta técnica la haremos con buena temperatura, entre los meses de primavera y verano. Cortamos un trozo de hoja y lo plantamos superficialmente en una maceta con sustrato continuamente humedecido.
A partir de ella empezarán a formarse raíces superficiales que formarán con el paso del tiempo una nueva planta.
Poda y mantenimiento de cola de burro
Sedum morganianum necesita pocos cuidados. La poda generalmente no se da salvo para eliminar tallos afectados o dañados. También se puede podar ligeramente si vemos que su longitud es muy prominente e incluso llegan a tocar el suelo.Plagas y enfermedades
La planta cola de burro no tiene muchos problemas en cuanto a plagas y enfermedades. Puede ser habitual en este tipo de especies recibir cochinillas, unos insectos inmóviles de color blanco que se pegan a los tallos y absorben la savia.Su eliminación es bastante sencilla, y consiste en humedecer un paño con agua y alcohol y retirarlos manualmente. También puedes pulverizar la planta cada 5 días con agua y jabón potásico.
Con el exceso de humedad y un aporte elevado de agua aparece el fenómeno de asfixia radicular y hongos que viven en entornos de baja oxigenación. En general causan enfermedades de cuello que terminan pudriendo la planta.
Una vez ha sido afectada, la solución es muy complicada.
Algunos problemas que pueden aparecer
Vamos a intentar identificar los principales problemas que pueden afectar a Sedum morganianum y, en general, a las plantas suculentas.Hojas amarillas
Cuando los tallos tienen las hojas amarillas puede deberse a 2 causas:
Exceso de agua: la abundancia de agua en el sustrato causa la pérdida de verdor y flacidez general. Si hay presencia de hongos, en el cuello de la planta y tallos se observan manchas marrones y blandas.
Sol directo: el Sol directo, especialmente en verano, causa pérdida de verdor y sequedad en las hojas. Procura disponerla en una zona con iluminación pero sin Sol directo.
La forma de diferenciar un problema de otro es que, ante un exceso de humedad, la planta pierde tensión y se encuentra flácida, caso contrario en las manchas habituales por exceso de insolación.
Hojas arrugadas
Las plantas suculentas como Sedum morganianum, cuando pierden mucha agua se empiezan a arrugar. Esto solo ocurre cuando la sequía ha avanzado y han pasado muchos días sin recibir nada de agua.
A pesar de su resistencia a la sequía, es fácil retornar a una situación mejor con el aporte de agua. La planta lo notará en menos de 20 minutos.
Hojas oscuras o marrones
Las hojas marrones u oscuras pueden indicar un problema relacionado con hongos de humedad. Es habitual cuando nos pasamos con el riego y aparecen manchas blandas que causan podredumbre.
Para intentar recuperar la planta, secaremos lo antes posible el sustrato y aplicaremos un fungicida a base de cobre.
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