Pero sí, es tan real como el resto de plantas pertenecientes a la familia Asclepiadaceae.
A continuación podréis disfrutar de 20 imágenes de hoyas espectaculares e información sobre su cultivo para que consigáis ejemplares igual de hermosos (o más ;) ). Espero que os gusten tanto como a mí.
(Imagen/ Flickr: Francisco Soto)
(Imagen/ Flickr: Tukang Kebun)
El tallo de esta planta puede alcanzar los 6 metros de altura, sus hojas 5 cm. de ancho y 13 de largo.
Pero lo que realmente llama la atención de la flor de cera son, precisamente, sus flores que además son aromáticas.
Agrupadas en forma de paraguas, tienen un color blanco radiante y de centro rosa muy muy característico.
(Imagen/ Flickr: JohannesLundberg)
(Imagen/ Flickr: Thoothulee)
(Imagen/ Flickr: Fuad Al Ansari)
Esta planta trepadora procedente de Asia y Australia requiere una serie de cuidados para mantener su belleza intacta. ¡Apunta!
- Luz abundante indispensable para florecer, aunque no directa, al menos en las horas centrales del día. Así que mejor ubicarla en el interior, cerca de una ventana.
- Necesita temperaturas cálidas que bajo ningún concepto desciendan de los -3ºC. Aunque si el calor es excesivo conviene pulverizar las hojas de vez en cuando.
- En otoño e invierno se deberá reducir el riego al mínimo, únicamente cuando el sustrato esté seco, ya que al ser carnosa cuenta con reservas suficientes. En primavera y verano podremos aumentar paulatinamente la frecuencia. No obstante, la humedad sí es fundamental, esto quiere decir que en interior debemos tener cuidado con la calefacción que puede llevar a matar nuestra planta.
- Abonar cada 15 o 20 días en primavera y verano con un aporte rico en potasio. De esta forma podremos disfrutar de flores durante esta época cada 10 días (aprox.).
(Imagen/ Flickr: 澎湖小雲雀)
(Imagen/ Flickr: wlcutler)
(Imagen/ Flickr: 澎湖小雲雀)
Cómo cambiar de maceta
Gusta de macetas un pelín pequeñas, así que trasplantar cada 2 o 3 años es más que suficiente.
(Imagen/ Flickr: 澎湖小雲雀)
(Imagen/ Flickr: 澎湖小雲雀)
(Imagen/ Flickr: Martin_Heigan)
Cuidado con:
- Las corrientes de aire, cambios de localización, calor o sequía excesiva que pueden causar la caída de capullos.
- La falta de luz, nutrientes, humedad ambiental, sequedad o un recipiente excesivamente grande puede paralizar la floración.
- El exceso de riego o la falta de nitrógeno tornará las hojas amarillas y sus puntas negras.
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Más imágenes:
(Imagen/ Flickr: Martin_Heigan)
(Imagen/ Flickr: Martin_Heigan)
(Imagen/ Flickr: Tukang Kebun)
(Imagen/ Flickr: 澎湖小雲雀)
(Imagen/ Flickr: ekenitr)
(Imagen/ Flickr: Fuad Al Ansari)
(Imagen/ Flickr: Fuad Al Ansari)
(Imagen/ Flickr: dhobern)
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