Los huertos orgánicos están cada vez más presentes en nuestras ciudades, pues son muchas las personas que optan por cultivar sus propios alimentos en cualquier pequeño espacio de su hogar. Y aunque parezca imposible desarrollar una parte de la agricultura en un entorno urbano, no lo es para nada con un poco de creatividad y tras estudiar el espacio del que disponemos y su aprovechamiento. Puedes empezar por cultivar hierbas aromáticas en simples macetas y acabar con la ilusión de comerte los tomates que tú mismo has plantado y visto crecer. El ensayo-error, es decir, la experiencia, es siempre la mejor manera de conseguir unos resultados satisfactorios, pero a continuación te ofrezco unos trucos de jardinería para que aprendas a hacer un huerto orgánico en casa.
¿Qué espacio necesito?
Contar con una terraza mínimamente amplía es lo ideal para desarrollar un huerto ecológico en casa. Esta mayor o menor amplitud que puede tener tu terraza te va a permitir disponer diferentes estructuras horizontales a base de palés, cajas de madera o construcciones de madera que tú mismo puedes hacer y en las que cultivarás vegetales varios.
Además, a este huerto horizontal puedes adjuntarle uno vertical complementario en el que plantar hierbas aromáticas o flores decorativas. Y si no dispones de una terraza pero sí de un balcón, lo ideal es aprovechar la parte vertical del espacio para colocar grandes jardineras en las que poder plantar hierbas aromáticas y algunos vegetales que no precisen de tanta tierra. Y si tu balcón dispone de baranda, también puedes disponer jardineras o maceteros colgantes. Y como última alternativa, si no dispones de ningún espacio exterior, siempre puedes colocar un palé o algún sistema de maceteros en una pared interior que reciba mucha luz. Tal vez no puedas plantar vegetales, pero sí hierbas aromáticas para darle mejor sabor a tus platos.
Estructuras , macetas y recipientes
Como decíamos más arriba, lo ideal es construir tu propia estructura a base palés o madera para que se adapte como un guante al espacio del que dispones y aprovecharlo lo mejor posible. Por supuesto, también se puede plantar en macetas grandes o en sacos de patatas llenos de tierra. Los palés también te permiten completarlos con otras estructuras más pequeñas, como macetas o algún recipiente reciclado, y llenarlos con flores, hierbas aromáticas, hojas, tallos, etc. Y por supuesto, cualquier recipiente pequeño reciclado (como botellas de plástico) o macetas puede ser colgado para crear una bonita estructura repleta de verdor y un buen olor. Por otra parte, utilizar materiales complementarios como cuerdas y clavos es el mejor sistema para colgar recipientes pequeños y aprovechar el espacio vertical.
Macetas originales
Materiales
En primer lugar, lo que necesitas es tierra, sustrato, humus o cualquier mezcla hecha por ti mismo que sea perfecta para abonar las plantas y hacer que crezcan fuertes y sanas. Por otra parte, contar con una pala, un rastrillo y una regadera es importante para trabajar más rápidamente, aunque utilizar las manos es de lo más divertido y relajante. Recuerda reutilizar el mayor número posible de recipientes, pues por ejemplo puedes hacerle agujeros al tapón de una botella de plástico para utilizarla como regadera.
Herramientas de jardinería
Semillas o brotes
A la hora de plantar es importante informarse de la temporada de cultivo de cada planta o vegetal, o de lo contrario no podrás recolectar nada. Una vez que decidas qué vas a plantar, tienes que establecer un orden y asociar vegetales entre sí para que el aprovechamiento sea el máximo. A la hora de plantar, puedes optar por semillas o brotes (estos últimos son más fáciles y rápidos de cultivar).
Mucha luz y agua
Para que crezcan, plantas y vegetales necesitan la luz, el calor y el agua necesarios, que en algunos casos será abundante mientras que en otros no. Estudia bien las necesidades de cada cultivo y dale la cantidad justa de aquello que necesita.
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