La palmera de salón es una de las más utilizadas para interiores, tanto por su tamaño, que no es demasiado grande, como por la facilidad de su mantenimiento. Pertenece a la familia de las Arecaceae y tiene su origen en México, Guatemala y Belice.
La palmera de salón posee un único tallo del que salen ramas con hojas alargadas y estrechas.
Tras crecer lentamente puede alcanzar los dos metros de altura.
Las flores, de color amarillo o anaranjado, aparecen durante todo el año, aunque no son demasiado vistosas.
Además, crecen pequeños frutos esféricos de color negro.
(Imagen: Wikimedia)
Dónde cultivarla
La Chamaedorea elegans se reproduce con facilidad a partir de semillas o por división.A la hora de plantarla, disponemos de dos opciones: bien en una maceta en interiores, que es lo más habitual en esta especie de chamaedorea, o bien en el exterior.
En este último caso, buscaremos un emplazamiento a la sombra o semisombra, donde su follaje lucirá un tono verde intenso. Si está constantemente expuesta al sol, corremos el riesgo de que las hojas adquieran un color amarillento.
En cualquiera de los dos casos, el terreno ha de ser una mezcla de turba y tierra negra, y tendrá un buen drenaje, para evitar los encharcamientos. Asimismo, ha de ser ligeramente ácido y rico en nutrientes.
Cuidados muy sencillos
A la Chamaedorea elegans le gusta la humedad. Por ello, el riego es necesario, aunque no debe ser muy abundante. Un exceso de líquido puede provocar que el ejemplar se pudra.Para un óptimo desarrollo, conviene incorporar al sustrato fertilizante líquido, especialmente durante el verano.
Si la hemos cultivado en el interior, a medida que va creciendo, hemos de trasplantarla anualmente a recipientes de mayor tamaño.
Si en una misma maceta hemos cultivado varios ejemplares, tendremos cuidado al tratar las raíces, para no dañarlas ni separarlas.
Al ser una palmera de tallo único y no necesitar un espacio demasiado amplio para su base, es adecuado plantar varios ejemplares juntos, para darle un aspecto más robusto al conjunto.
Asimismo, resultará atractiva si la combinamos con ejemplares de hoja más ancha.
- Todo sobre el cuidado de las palmeras en este post.
(Imagen: Wikimedia)
Plagas y enfermedades
También hemos de ocuparnos de las plagas, ya que afectan a esta palmera.Destacan la araña roja, que hará que las hojas se caigan, y que combatiremos con un acaricida; el pulgón, que producirá diversos daños a la palmera; y la cochinilla, que detectaremos en la deformación de las hojas.
Los dos últimos los eliminaremos con insecticidas. Asimismo, podemos encontrar hongos como el mildiu; la solución es aplicar un fungicida.
Otra de las enfermedades que constituye un obstáculo para su buena salud es la clorosis, que se produce por una carencia de hierro entre los nutrientes del terreno. Para remediarlo, es adecuado regar con agua de lluvia y acidificar el suelo, así como emplear productos específicos.