Cuidados básicos
Cuidar una planta de durazno no es fácil, ya que requiere atención incluso desde antes de plantarla, en el suelo de tierra o maceta donde planeas hacerlo; una tierra con un nivel de PH desbalanceado causa que este árbol no absorba los nutrientes esenciales, principalmente el hierro, por lo que no crecerá ni dará frutos correctamente. Además, las ramas de esta suelen crecer de forma desmedida, por lo que, una vez madura, debe recibir podas regulares; de igual forma ocurre con la fertilización, pues la necesidad de nutrientes del durazno es bastante amplia.
Cuidados ante plagas y enfermedades
SI tu árbol o brote presenta síntomas como manchas redondas y taponadas, oxidación en el tronco, ramas muertas, caída prematura de hojas o gomosis; así como tejido necrótico o desprendimiento de corteza y clorosis invernal, es muy probable que sufra el azote de una plaga o un hongo. Por suerte, muchos pueden ser reconocidos como residuos o manchas, blancas o de otro color, en ciertas partes del árbol. Si no sabes cuál es la causa, lo mejor es buscar información en un vivero, junto con los productos y pesticidas especiales para cuidar una planta de durazno en estos casos.
Lo mismo ocurre con los insectos que infectan el árbol, aunque cuidar una planta de durazno de estos es diferente, ya que requiere de insecticidas de jardín para cada especie, una vez reconozcas el tipo; además, estos representar otro problema, ya que suelen devorar las hojas, frutos y savia del durazno, deteriorándolo rápidamente y no se puede solucionar, como en el caso de hongos recientes, con solo podar las zonas afectadas.