Hasta el año 2006 no hemos tenido en nuestro país la primera promoción de paisajistas superiores titulados, gracias al convenio firmado cuatro años antes por la Escuela de Paisajismo Castillo de Batres y la Universidad Camilo José Cela. Los estudios de estos diplomados en paisajismo se desarrollan a lo largo de cuatro años, cursando asignaturas de todos los ámbitos: historia del arte, psicología ambiental, urbanismo o botánica general son breves ejemplos de este amplio plan de estudios que busca formar profesionales completos.
Cualidades que debe reunir un paisajista
Muchos de los paisajistas que llevan años trabajando en nuestro país son ingenieros agrónomos, biólogos o agentes forestales que han ido encaminando su labor profesional hacia este campo. Para Juan Luis Ruiz de Dyezma, "hoy en día hay demasiada gente metida en el mundo del paisajismo que no ha recibido una formación global adecuada. Un buen profesional debe aglutinar conocimientos sobre filosofía, música, pintura, arquitectura, botánica y otras materias diversas". Por su parte, Enrique Paredes, director de la Escuela Castillo de Batres, opina en la misma línea que Dyezma: "nosotros aportamos un conocimiento integral del paisajismo, pero no sólo de profesionales que no han recibido estudios, sino también de otros titulados que adolecen de cierta deformación profesional".Toda persona que quiera dedicarse profesionalmente a este sector, debe conseguir un equilibrio entre conocimientos teóricos y una importante formación práctica. Ruiz de Dyezma asegura que "el paisajista debe ser capaz de traducir los gustos y preferencias del cliente al diseño de un paisaje, mediante la técnica de la botánica, la edafología, climatología, etc. y ungirlo de arte y creatividad para que armonice estéticamente tanto con el entorno como con la época actual." Es importante conocer a fondo a las personas, tener la capacidad de profundizar en sus gustos y preferencias, ya que puede ocurrir que el proyecto que plantea el cliente no sea el más adecuado para él.
Situación actual de la enseñanza
A pesar de no existir oficialmente una carrera universitaria, en nuestro país existen muchas escuelas que ofrecen masters, cursos y títulos propios que abordan el paisajismo desde muchas vertientes. Su duración es muy variada, de seis meses a cuatro años, y son un buen punto de partida para introducirse en este mundo. En el Castillo de Batres, los alumnos también realizan trabajos prácticos durante sus estudios. En la escuela no se ponen trabas a la creatividad de cada persona, pero sí intentan que sus alumnos elaboren proyectos factibles que no sean un simple cuadro dibujado en su imaginación, utilizando todo tipo de recursos, tal y como confirma su director: "desde primer curso las clases se enfocan de forma práctica. En segundo, tercero y cuarto desarrollan todas las tipologías de Jardín y Paisaje, disponiendo de medios manuales y multimedia para trabajar".Dentro del amplio programa de estudios que contempla la enseñanza de paisajismo en la Escuela de Batres, las asignaturas que más valoran los alumnos son las de 'Restauración Paisajista' y 'Proyectos', ya que su conocimiento supone el dominio de las materias de las cuatro áreas: gráfica, técnica, humanística y de paisaje.
Además de estas asignaturas, también encontramos otras que, a priori, pueden resultar extrañas cuando hablamos de paisajismo, como puede ser 'Legislación y sociología' o 'Medio socioeconómico', y que demuestran la riqueza temática de la que goza el programa de esta escuela.
Panorama laboral del paisajista
Los profesionales formados en paisajismo tienen hoy un mejor panorama laboral que hace unos pocos años. A pesar de esto, los más veteranos no lanzan las campanas al vuelo y son prudentes, ya que, como afirma Enrique Paredes, "debido a la falta de un título oficial con sus competencias correspondientes y al intrusismo que existe, aún hay dificultad para encontrar trabajo". En referencia a este mismo punto, Ruiz de Dyezma también se lamenta de la falta de preparación de muchos profesionales que trabajan en este sector, y alaba la labor de la Asociación Española de Paisajistas, que lucha por oficializar el título en nuestro país.Actualmente, los países más importantes de la Unión Europea cuentan entre sus titulaciones universitarias con la carrera de paisajista, algo que en nuestro país todavía no se ha producido. Profesionales y estudiantes esperan que, con los acuerdos de Bolonia, se reconozca de una vez por todas el título y se déun impulso importante a esta profesión. Para el director de la escuela Castillo de Batres, "el paisajismo español está en continuo progreso, aunque sigue rezagado con respecto a otros países".
Llegar a ser un gran paisajista está en la mano de cada uno. Las escuelas aportan una formación muy necesaria, pero también debemos poner de nuestra parte para convertirnos en un profesional cualificado. La vocación en este caso debe ser innata en cada persona, e ir unida con un fuerte espíritu artístico.
Agradecimientos especiales a Enrique Paredes, director de la Escuela Castillo de Batres (secretaria@escpaisajismobatres.com) y a Juan Luis Ruiz de Dyezma, paisajista (juanluis@ruizdyezma.com).