El jardín frontal de tu hogar puede ser el lugar perfecto para que tú y tu familia tomen un poco de aire y hagan ejercicio, algo muy importante para mantener nuestra salud mental en estos tiempos. Además, es la primera impresión que las personas se llevan de tu hogar. Por lo tanto, es menester mantenerlo en buenas condiciones; una forma de lograrlo es decorándolo con flores. A continuación te explicamos cómo hacerlo.
Analiza el clima de la zona donde habitas
Al instante de esquematizar tu paraíso de flores, debes estudiar el clima de tu entorno y qué clase de flores pueden crecer ahí y qué cuidados requieren. Solo así podrás conseguir un jardín precioso y llamativo. Vamos a ver qué flores son adecuadas según el estado del clima, para ayudarte a adquirirlas.
Si habitas en un clima tropical, tendrás la oportunidad de plantar flores con colores muy vivos, a saber, la flor de mayo u orquídea; que resulta ser la flor nacional de Venezuela, la penta, la lantana, el jazmín azul, la portulaca, la begonia y la mandevilla. Sus extravagantes colores harán brillar tu jardín.
Si vives en un entorno frío, te conviene plantar el ciclamen; que puede desarrollar una amplia variedad de colores, la margarita de los prados, la hortensia de invierno, el crisantemo y el narciso. Todas estas opciones son capaces de avivar la parte frontal de tu estancia en pleno invierno.
Si tu residencia se halla en un lugar templado, necesitas flores adaptadas tanto al frío como al calor. Te podemos recomendar la prímula, el cardenal y el jazmín chileno. Estas tres variantes ostentan colores hermosos y delicadas formas.
Características del suelo
Existe un factor clave en el crecimiento de nuestras flores y es el tipo de suelo que poseemos. Se suele pasar por alto pero no debe ser olvidado. Hay que estudiar sus condiciones y características; si el suelo es compacto o arcilloso y qué tipo de PH presenta la tierra, si es alcalina o ácida. También vale la pena examinar si nuestro suelo es húmedo o seco.
Alumbrado
La determinación de cuánto sol y sombra reciben las áreas de tu jardín te dará los indicadores de los lugares en los que deberás colocar las flores. Asimismo, debes darte cuenta si el viento que transita por tu vivienda es el adecuado o si es demasiado, pues lo último tiene la capacidad de secar todas tus plantas. Por lo tanto, examina también los árboles, arbustos y paredes que hay alrededor.
Dimensiones y estilo
Es vital tener consciente el tamaño pertinente para el jardín; uno de tamaño mediano sería lo idóneo porque la impresión visual no sería mermada y no requeriría tantos cuidados. De igual manera, te recomendamos adaptar el tamaño de tus flores y plantas al de tu ambiente.
Por otro lado, la delimitación del estilo de tu jardín es un punto a resaltar porque con eso tendrás un espacio que expresa quién eres y con el que te sentirás cómodo. Además pregúntate qué buscas experimentar al observar tu jardín. Por lo que sigue, te mostraremos algunas de esas vertientes, para ayudarte a tomar una decisión.
Si te gusta lo moderno y ordenado, puedes comenzar decorando tu jardín con un camino de madera o cemento y alrededor colocar las flores en macetas. Igualmente, si estás en posesión de muchas flores coloridas, una idea original es establecer un patrón de colores, logrando un efecto visual muy estructurado. Si posees una casa pequeña, el estilo minimalista es para ti. Para lograrlo, usa elementos de la naturaleza, como las rocas, arbustos y por supuesto las flores.
Si lo tuyo es un ámbito botánico, un estilo naturalista y relajante es lo que necesitas. Es muy sencillo de lograr; se caracteriza por tener un talante informal y silvestre, el cual puede ser logrado dejando crecer las plantas y flores en un espacio, sin macetas y fuentes de agua serán necesarias, para poder recrear ese ambiente natural y salvaje que deseas.
Si tu casa tiene escaleras en el exterior del jardín, puedes decorarlas colocando una maceta con flores en la esquina de cada escalón. De esta forma, no dejarás ni un rincón sin esa esencia floral. Haciendo alusión a las macetas, te recomendamos no regar tus flores de forma excesiva, para evitar que se ahoguen.
Colores
Los tonos a elegir deben combinar con el diseño de tu hogar, para así establecer una armonía y estructura. Tonalidades en flores como el rojo, amarillo o naranja deben ser colocadas al fondo debido a su colorido. Colores más fríos como el lavanda o el azul se ven bien de cerca. Si tu estancia tiene un lugar oscuro, unas flores blancas se encargaran de iluminarlo. Por último, tonos
oscuros y violetas lucen en zonas con luz.
Recursos complementarios para tu jardín
Para lucir un jardín simétrico, no todo puede tratarse de flores. Aparte de ellas, puedes completar tu nuevo paraíso floral con casas para aves, piedras y bancos para leer, los cuales deben ser congruentes con el estilo que has seleccionado para tu jardín. Por añadidura, el camino que es construido en nuestro jardín floral deben combinar con nuestro estilo; los hay rectos (propios de gustos contemporáneos) e irregulares (perteneciente a talantes naturalistas).
Por otra parte, si hay niños pequeños en casa, seguro desean salir un poco de la casa y tomar algo de sol y aire. Condicionar una parte de tu jardín frontal para ellos sería genial; podrías colocar una pequeña mesa donde puedan pintar o jugar de forma segura.
Para finalizar, te hemos proporcionado algunas herramientas para que vayas planificando la creación de tu jardín; un lugar con capacidad de convertirse en algo terapéutico en estos momentos estresantes que vivimos actualmente.