Las macetas decorativas nos permiten crear un hogar artificial para las plantas, gracias al receptáculo de tierra, mientras que las jardineras ofrecen la posibilidad de aumentar el espacio de cultivo, así como organizar las variedades por las que hemos optado.
Existen tantos materiales y formas de macetas decorativas como se te antojen. Desde el tradicional barro cocido pasando por los metales y la madera, todos ellos al natural, barnizados o envejecidos, y, por supuesto, decorados con diversos colores o motivos ornamentales. Pero cuidado: no elijas cubetas demasiado llamativas o recargadas: ganarán protagonismo respecto a la belleza natural de tus plantas.
Para los interiores, nada mejor que los cubremacetas, siempre de un par de centímetros más de diámetro que el tiesto para que entre bien. Tampoco olvides que viene muy bien que los tiestos incorporen un agujero en la base para facilitar el drenaje. Si no lo tiene, siempre puedes hacerlo tú mismo en casa, con mucho cuidado y la ayuda de una taladradora.
Una vez que tengas claro el diseño de tu rincón verde, sólo deberás plasmarlo con los artículos adecuados. ¿Necesitas algunas ideas? Toma buena nota.
Juego de dos tiestos de barro cocido
De Unopiù. Macetas con un aire muy natural gracias al barro de color claro y las líneas simples verticales que las decoran.
La pequeña tiene 28 cm. de diámetro y 28 cm. de altura. La grande, 37 de diámetro y 40 cm. de alto.
Macetero Husön
De Ikea. De líneas sencillas y aire moderno, está fabricado en acero galvanizado resistente al óxido.
Producto reciclable, con 51 cm. de diámetro, 41 de alto y 44 cm. de diámetro interior.
Maceta-Jarrón Eva Solo
De Caprichos Daneses. Nos proponen un sistema muy sencillo y, a la vez, innovador: es fácil saber si la planta está sedienta gracias a un depósito de agua que incorporan en la parte inferior. Si comunicamos la tierra con el depósito mediante cordones, las plantas absorben el agua por capilaridad. Cuando se agota el líquido, sólo tenemos que rellenarlo.
La maceta tiene dos partes, la cerámica y la de vidrio (donde almacenamos del agua), y está disponible en dos tamaños (13 y 15 cm. de diámetro). Se vende en cuatro colores: terracota rojo, terracota claro, gris oscuro y blanco.
Jarrones de hierro colado
De Unopiù. Tanto el material como su diseño, fiel reproducción del estilo imperio, otorgan al jardín una impronta clásica y atemporal. Puedes elegir el acabado, o bien, encerado transparente, o color plomo oxidado.
Disponibles tres dimensiones: 36 x 46 cm. y diámetro interno de 28 cm. máximo; 48 x 61 cm. y diámetro de 35 cm.; 56 x 77 cm. y diámetro de 40 cm. (peso: 49 kg).
Jardineras Windsor
De Unopiù. Geométricas y en madera maciza de nyatoh natural, destacan por su versatilidad: son aptas tanto para entornos clásicos, como para jardines o balcones más actuales y desenfadados.
Disponible en tres tamaños: 53 x 53 y 48 cm. de alto; 42,5 x 42,5 y 66 cm. de alto; 53 x 53 y 90 cm. de alto.
Macetero Gandía Blasco
De Gandía Blasco y diseñado por José A. Gandía. Minimalista y funcional, está elaborado en aluminio anodizado.
Disponible en cinco versátiles tamaños: 70 x 30 x 30h cm; 30 x 30 x 90h cm; 70 x 70 x 30h cm; 50 x 50 x 30h cm; 30 x 30 x 30h cm.
Maceta Fänö
De Ikea y diseñada por Johanna Jelinek. Muy útil, económica y resistente a las heladas, por lo que es posible dejarla a la intemperie todo el año. De loza y base con perforación para mejor drenaje.
Medidas: 34 cm. de diámetro; 25 cm. de altura y 31 cm. de diámetro interior.
Jardinera Desdemona
De Unopiù. Con grandes posibilidades, no sólo para la ornamentación (podemos crear cascadas con plantas colgantes), sino para organizar las plantas, ya que permite crear una pirámide de macetas.
Dispone de 15 anillos para tiestos y está elaborada con hierro galvanizado pintado con polvos de color grafito. La base tiene un diámetro de 143 cm.
Macetero Reveln
De Ikea. Reciclable. Elaborado con algas marinas, acero inoxidable, sauce y aluminio anodizado. Sus dimensiones son: longitud, 22 cm; ancho: 22 cm; altura: 21 cm.