Fuente: Nathsegato / pixabay.com
Generalidades
Esta planta crece como un arbusto pequeño con hojas carnosas. Solo se dan en zonas con clima cálido ya que no toleran las temperaturas muy frías. Su aspecto es muy frondoso, con tallos de color marrón y hojas verdes en forma de moneda. De ahí proviene su nombre coloquial. Cuando crece de manera salvaje, puede llegar a medir 6 metros pero en una maceta, unos 2 metros es lo que alcanzará.
La planta de la moneda produce pequeñas flores rosadas cerca de los extremos de las ramas. Sin embargo, es raro ver esto en macetas. Más que todo se le cultiva como un bonsái, ya que tiene la apariencia de un arbolito y es sencilla de mantener. Ahora pasemos a hablar de los cuidados que la planta necesita.
Plantación
Necesita estar en un lugar donde no reciba sol directamente, por lo que puedes tenerla dentro de la casa. Esto ayuda que las hojas de la planta de la moneda crezcan más grandes y brillantes. Si decides tenerla afuera de la casa, procura que el sol que obtenga sea de manera indirecta. En cuanto la sustrato, pueden crecer en cualquier suelo que favorezca el drenaje del agua.
Riego
Será suficiente con regarla cada quince días. Esto se hace en climas calientes y conforme se va acercando el invierno, el riego se va retrasando un poco más. Al momento de regarlas, es importante no llenar las hojas con agua porque se manchan. No uses mucha agua para regarla porque eso favorece que las raíces se marchiten y las hojas se caigan. Si a la planta de la moneda se le riega de forma excesiva, favorecemos la aparición de enfermedades
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