Tener una piscina en el jardín puede cambiar nuestra vida por completo. Y es que no sólo su toque de frescura convierte a nuestro jardín en uno más completo y hermoso, sino que además aporta diversión, tiempo de ocio y momentos de relajación.
Seleccionar la piscina que más se adapta a tu estilo de vida garantizará un verano familiar único y lleno de diversión. Son miles las piscinas que existen para todos los gustos y jardines. Aquí os dejamos las clases más comunes que hay en el mercado y las ventajas de cada una.
Piscina sobre suelo
Desde luego, este tipo de piscina es el más económico y el de más sencillo montaje. No se necesita hacer obras ni la ayuda de un profesional. Podréis comprar una prefabricada (desmontable) y colocar la piscina en vuestro jardín. Lo importante será situarla sobre una superficie plana, montar una pista perímetro que soporte la pared exterior, y colocar las tuberías (si las lleva). Luego tan sólo habrá que llenarla de agua, y conectar la bomba y sistema de filtrado.Disponéis de diferentes dimensiones y diversidad de materiales. Pueden adaptarse a cualquier necesidad. Son perfectas para las familias con un presupuesto no muy elevado o falta de espacio.
Piscinas de fibra de vidrio
Estas piscinas están hechas de fibra de vidrio reforzado con plástico que ha sido modelado según la forma de la cuenca de la piscina.
Para colocar esta piscina en vuestro jardín es necesaria una instalación previa donde se necesita cavar un agujero, colocar el sistema de tuberías necesario, añadir relleno de arena y crear la estructura definitiva de la piscina. Luego, nivelarla y conectar las tuberías.
Su vida útil supera los 100 años y pueden ser trasladas de un lugar a otro. Además, son difíciles de romper o agrietar, es muy difícil que pierda agua. Su coste de reparación no es elevado y su instalación es mucho más rápida por ejemplo que el caso de las piscinas de hormigón. También es fácil de limpiar.
Piscinas Gunite
Quizás sea uno de los diseños más comunes. Del mismo modo, es necesario crear un agujero, colocar el sistema de tuberías y una pared de estructura de barras de acero para reforzar.
Son muy duraderas y pueden adoptar la forma que queramos. Su durabilidad hace que su mantenimiento sea casi nulo y es una de las más resistentes.
El Gutinado añade impermeabilidad total y unos acabados óptimos al gusto de cada cliente. Estas piscinas son las que conocemos con acabado en yeso, pinturas especiales, azulejos, piedras de colores,etc.
Piscinas de hormigón
Muy similares a la Gunite pero más difíciles de construir. Su mayor ventaja es la resistencia del material y la posibilidad de crear la forma que queramos. Mientras con la de fibra de vidrio, la forma viene establecida, en este caso podemos modelarla a nuestro gusto.
Piscinas de vinilo
Estas son muy parecidas las piscinas sobre suelo en cuanto a su estructura, pero su montaje es el tradicional. Es necesario crear un agujero en el suelo de vuestro jardín y montar las paredes de metal, plástico o madera.La mayor ventaja de estas piscinas de vinilo es que son más baratas, pero no duran tanto tiempo. Normalmente, el revestimiento debe ser cambiado cada 10 años y son más susceptibles a roturas y grietas.
Imágenes: piscinasfibra.info; Flickr/ bbaunach; Flickr/ Coppell Pools; Flickr/ Concrete Forms
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