Por estos días he visto desde medios internacionales, revistas, ongs hasta al más chiquito de la casa hablando sobre los polinizadores. No es para menos, resulta que estos animalitos son tan importantes y es tan importante que nosotros seamos conscientes de su importancia que hasta los programas infantiles hablan de ellos. (Voy a ser un paréntesis aquí para aclarar porque la palabra consciente la puse en negrita, y es que me pareció super interesante la definición que google da de la misma: "Que siente, piensa y actúa con conocimiento de lo que hace").
Retomando el tema, uno de los polinizadores más importantes son, por supuesto, las abejas; y es que estos insectos además de tener una sociedad digna de admirar y de ofrecernos productos excelentes para nuestra salud y belleza, no está por demás decirlo, de delicioso sabor, cumplen una función de vital importancia: La polinización.
La FAO en su pagina oficial dice "los polinizadores proveen un servicio ecosistémico esencial: la polinización. En efecto, aproximadamente el 80% de todas las especies de plantas con flor son polinizadas por animales, como vertebrados y mamíferos; sin embargo, los principales polinizadores son los insectos. La polinización es el proceso que nos permite contar con una amplia variedad de alimentos..." "...los polinizadores como las abejas, las aves y los murciélagos inciden sobre el 35% de la producción agrícola mundial, aumentando el rendimiento de 87 de los principales cultivos de todo el mundo ..."
El efecto que producen los agroquimicos afecta a los polinizadores causándoles la muerte, a nosotros nos entrega alimentos, aire y fuentes hídricas contaminadas, enfermedades congénitas que tristemente trasmitiremos a las nuevas generaciones. Un panorama, sin duda alguna, desolador, que ya a prendido las alarmas en la mayoría de países desarrollados!
Recientemente, publiqué en nuestra pagina de facebook un link de greenpeace (www.facebook.com/abejasymiel.ltda), donde se trata esta problemática y nos dan información importante de como podemos contribuir a salvar los polinizadores. El llamado es a hacer mejor uso de nuestras herramientas (sembrar nuestras propias hortalizas, no apoyar el uso de insecticidas, plaguicidas ..., comprar local y ecológico), a ser conscientes de nuestro papel y de la huella que dejamos en el mundo.
¡Somos lo que comemos! ¡No permitamos que la comida se convierta en nuestra causa de muerte! ¡Salvemos los polinizadores! ¡Salvemos las abejas!