Entre las plagas y enfermedades más comunes que nos podemos encontrar en los cultivos de lechuga podemos detallar las siguientes:
PLAGAS
Trips. Pueden aparecer en épocas de Verano si estos son excesivamente cálidos y secos. Son pequeños insectos de color amarillo-marrón. Las picaduras de estos afectan a las hojas secándolas, además transmiten enfermedades. Para evitar su aparición es aconsejable realizar las rotaciones y asociaciones adecuadas al cultivo de la lechuga. Es primordial mantener el regado adecuado y mantener la humedad necesaria para eliminar esas malas hierbas que esta terrible plaga utiliza como refugio. El enemigo por natural de los trips es el orius su máximo depredador.
Pulgón. Los pulgones son pequeños insectos dañinos que se alimentan de nuestras plantas. Necesitamos de lupa para verlos correctamente. Existen pulgones de muy diferentes clases, negros, verdes, alados, sin alas... La mejor manera de combatirlos es la prevención de su aparición. Y lo podemos hacer de distintos modos: respectando el marco de plantación de la variedad de lechuga en cuestión, realizando una rotación de cultivos correcta, asociando su siembra con otras plantas cuya asociación sea favorable, sembrando albahaca junto a la lechuga ya que esta repele a los pulgones.
Mosca blanca. Es un pequeño insecto alado de color blanco que puede desarrollarse en los cultivos de lechuga. Se alimenta de los jugos de las plantas introduciendo su cabeza en ellas y chupandolo a la vez que va chupando va depositando restos de estos jugos absorbidos sobre las hojas creando una fina película negra que impide la realización de la fotosíntesis por parte de la planta, además con sus picaduras transmiten enfermedades. Lo más recomendable para prevenir la aparición de dicha plaga lo mejor es cultivar albahaca junto a la lechuga, ya que su olor es capaz de repelerla.
ENFERMEDADES
Mildiu. Es una enfermedad provocada por un conjunto de hongos. Que producen manchas amarillas y blancas que con el paso de tiempo van haciéndose de color grisáceo. Afecta a la planta pudriendo la parte afectada y secándola. Debilita a la planta ya que esta no puede realizar correctamente la fotosíntesis. Se desarrolla en momentos de excesos de humedad. Es importante no mojar la parte aérea de la planta durante el riego y retirar las plantas afectadas para que no contaminen a las sanas.
Oídio. La enfermedad es producida por un hongo parasitario que afecta a las hojas de la lechuga cubriéndolas de una mancha blanca que provoca que esta se seque afectando de esta manera a la realización de la fotosíntesis por parte de la planta. Se desarrolla perfectamente en condiciones de alta humedad. La mejor manera para prevenirla es evitar mojar la parte aérea de la planta en el riego así como no cultivar lechugas con marcos de plantación excesivamente pequeños que produzcan masificaciones excesivas de estas. Dada a situación de que alguna planta ya tenga este hongo, lo mejor será sacarla del cultivo y proceder a quemarla para así evitar que dicho hongo logre dispersar sus esporas.
Brotitis. Esta enfermedad es provocada por el hongo de su mismo nombre brotytis. Afecta a plantas antiguas pudriendo las hojas y se desarrolla en ambientes excesivamente húmedos. Para prevenirlo evitar masificación de plantas y controlar la humedad.
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Imagen: Photofarmer / Flickr.
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