La productividad con esta técnica de cultivar patatas en el aire se multiplica por cinco: se pueden conseguir hasta 20 tubérculos por planta, cuando lo normal es obtener tres o cuatro. Además, las enfermedades que se transmiten a través del suelo también desaparecen, y se ahorra en agua y fertilizantes... ¡Vamos, que todo son ventajas!
Para que funcione la técnica de cultivar patatas en el aire, y para que crezcan, se necesitan invernaderos en los que mantener las raíces de la planta al aire y en total oscuridad. Éstas tienen que recibir nutrientes mediante un sistema de nebulización que pulveriza agua enriquecida con nutrientes. Las raíces se airean, y no se ven afectadas por agentes patógenos que hay en la tierra.
¿Qué os parece esta nueva forma de cultivar patatas?