La querria es una planta de la familia de las rosáceas, también llamada rosa japonesa, procede de China, y será el huésped perfecto de cualquier jardín, en solitario junto a paredes o en combinación con otras plantas.
(Imagen/ Flickr: Manuel Martin Vicente)
Puede llegar a medir dos o tres metros de altura. La querria posee unas finas ramas de esta planta de hoja caduca se cubren de hojas durante la primavera. Estas son de color verde brillante y su rasgo más distintivo son sus bordes, con forma de sierra.
Las hojas se ven acompañadas de flores de color amarillo brillante, desde marzo a mayo. Según la variedad, las flores pueden crecer dobles o en solitario, aunque el primer tipo es el más cultivado en las zonas verdes de las ciudades.
(Imagen/ Flickr: wallygrom)
La plantación más adecuada
La querria se reproduce por medio de esquejes, procedimiento que consiste en separar un trozo de tallo de la planta original para cultivarlo en la tierra, desarrollándose un nuevo vegetal.También se puede propagar a partir de macollas, que son los grupos de tallos que crecen de una misma base.
Un punto importante en el crecimiento de todo vegetal es el suelo en el que debe desarrollarse. Esta planta no es muy exigente en lo que al terreno se refiere, aunque éste no debe ser excesivamente seco y conviene que esté bien drenado.
Aunque parte del día la sombra sea la nota dominante en el ambiente del arbusto, conviene situarlo en un lugar donde reciba de vez en cuando la luz solar, ya que de lo contrario no será tan fácil que broten las flores.
(Imagen/ Flickr: TANAKA Juuyoh)
Un arbusto con pocos cuidados
Aunque no requiere demasiadas atenciones, por lo que es muy adecuado si no tenemos demasiado tiempo para dedicar al jardín, es importante mantener unos cuidados mínimos si se pretende que crezca en óptimas condiciones.Es conveniente realizar la poda una vez que el ejemplar ya ha florecido. Además, retiraremos las hojas y flores a medida que se van marchitando.
Asimismo, también es adecuado abonar el terreno, para que la planta disponga de más nutrientes para su correcto crecimiento.
El riego debe ser abundante, para mantener siempre el suelo húmedo, en especial durante los meses de verano, ya que no es apropiado que se desarrolle en un terreno seco.
Si se trata de cultivar en zonas donde el viento sople a menudo o de forma intensa, es adecuado ubicarlo en un lugar resguardado de este elemento, ya que, aunque soporta casi todas las condiciones, no le gustan en exceso las corrientes.
También hemos de protegerlo si crece en un clima muy duro.
En cambio, es una de las plantas que no se estropean con la contaminación, por lo que no le ocurrirá nada incluso si está ubicada en el centro de las ciudades.
La querria es una opción acertada como planta ornamental de cualquier jardín (descubre los diferentes tipos de plantas ornamentales con este post). Con tan sólo un poco de atención, crecerá y producirá abundantes flores que darán un ambiente primaveral a nuestro entorno.