toda la gama del verde se observa en un breve pestañeo
Fuente de inspiración, de orgullo y de trabajo
Obra del esfuerzo de manos duras
y entrenadas para lidiar con todo tipo de púas, espinas y picaduras sorpresivas.
Quien ha trabajado desde pequeñ@ la tierra, un jardín de exuberantes proporciones,
mantenido huertos sin días feriados,
labores interminables en predios de frutales, poda eterna de ligustrina,
sin duda ha preparado su cuerpo, su corazón y su alma
para llevar adelante estas tareas innumerables de cuidados del verde.
Sin embargo la naturaleza nos juega en contra alguna que otra vez, y por supuesto no nos avisa
El granizo breve...
arremete con fuerza
Y las plantas bellas hoy..
quedan dañadas en un instante.
Nuestros esfuerzos y los de tantos dejan desolación
al mordisquear hojas de suculentas
al lacerar con sus cuchillas filosas de hielo
furiosas lágrimas de cielo
picotean todo a su paso
Solo unos instantes dura pero el resultado es desastre total
A los pocos minutos vuelve el sol y con su brillo intenso revela el daño.
Como revertirlo, imposible.
Solo observo
Pienso en aquellos productores que están a punto de cosechar sus mandarinas, naranjas o kiwis.
En aquellos que invierten todo en cubiertas para sus invernáculos, y además de perder la cosecha, hay que volver a invertir
En aquellos que vuelcan su esfuerzo, ahorros de años
viéndolos desaparecer en apenas unos cuantos suspiros.
Yo solo observo mi jardín.
Espacio de descanso y de trabajo.
Frescor abundante en veranos implacables
Como arreglo ésto!!!!
Pienso cual se salva y cual se debe ir
Estos ejemplares grandes aguantaron mejor, les hago un spa
Otros mas pequeños no tienen tanta suerte, pero aún se salvan. Hago peluquería
vamos bien
Ni el níspero se ha salvado,
hace unos meses sus flores de fragancia extravagante almendrada
anunciaba una buena producción de fruto dulce
Ni la cola de caballo se libra, bailando al compás de la tormenta esos tallos huecos
se quiebran con facilidad.
Necesitan nuevo look
No solo del granizo nuestro jardín tiene temor.
El estrés hídrico, mucha humedad, mucha época de lluvia trae virus
y más pestes
La otrora verbena florida se quiebra
pero como sus raíces son duras cual piedra,
la espero para que con su abundante amarillo,
coloreé el paso
No me preocupo, no puedo contra la naturaleza.
La acepto y me ocupo.
A rastrillar y mirar para adelante....
(Debo agradecer el aporte de mi amiga Yolanda, de sus imágenes sobre el hielo del cielo)
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