Hola!! Hoy no traigo ningún tutorial ni receta, hoy escribo para contarte y mostrarte un poquito de mi mundo, lo que me gusta, lo que apasiona… Seguramente vos tendrás tus pasatiempos o hobbies a los que dedicas tiempo y amor… Los cactus son uno de mis amores, y disfruto mucho de ellos y de todo lo que devuelven, sus hermosas flores…
Mis seguidoras en Instagram ya conocen muchos de mis cactus y suculentas porque subo imágenes bastante seguido.
Desde hace mucho tiempo siento un gran amor por las plantas y las flores, lo heredé de mi mamá y de mi abuela que tenían jardines increíbles en los que me encantaba pasar largos ratos. Ninguna de las dos tenía cactus en ese entonces, y si había alguno, no se les daba el valor que tienen hoy. Cuando me casé y tuve mi propio jardín, pude disfrutar a pleno de mis plantas, intercambiaba con mi mamá gajitos, semillas y pasábamos mucho tiempo charlando de ello. Ella me decía que yo tenía mano verde, que hacía nacer lo que me propusiera. Es una pena inmensa que ya no esté conmigo, añoro tanto esos momentos!!… más que nada en el mundo…
Hace algo más de tres años, mi esposo me regaló un pequeño cajón lleno de macetas de cactus del tamaño de una tacita de café. Eran unos 15 o 16 ejemplares diferentes. Eran hermosos pero bastante pequeños como para hacerme cargo sin saber nada de ellos… Así que comencé a investigar, a hacerme de grupos de apasionados por los cactus y las suculentas en Facebook, a leer sobre el tema, hasta hice un curso para saber aún más. No soy experta ni mucho menos, pero no tuve que lamentar grandes pérdidas desde ese entonces…
Luego de investigar, supe que sería mi nueva pasión, al ver las imágenes de cactus con floraciones espectaculares se me llenaba la vista y se despertó en mi las ganas de comprar y conseguir cada especie que veía en la web…. Y fue así, jaja! Cactus que veía, cactus que traía a mi casa, y con tantos que tenía, un día me encontré sin un lugar apropiado para ellos. Iban rotando de un lugar a otro hasta encontrar lo que les hacía bien, pero claro! a algunos les gusta el sol, a otros la sombra, unos quieren agua, otros no… No es tan sencillo!!. Y por si fuera poco, les tocó atravesar una remodelación competa de mi casa y del patio, (eso implicó levantar todas las plantas que tenía y quería recuperar, y plantarlas en envases para luego transplantar a un lugar definitivo) un año de acá para allá, pobres!!!
Con los arreglos del jardín, tuvimos que pensar en un espacio único para ellos, no queríamos nada igual a lo que habíamos visto antes, pero que sea su hogar, con la protección que necesitan y la luz correcta… Así que, como diseñadora que soy, realicé una especie de “plano” para el nuevo “cactucero”. Cuando mi esposo lo vió le encantó pero no confiaba demasiado en el resultado.
De a poco lo convencí, y comenzamos con la obra…. Te muestro algunas imágenes con el paso a paso para que puedas hacerlo si te gusta…
Y así se construyó lo que llamamos “cactucero”, en esta última parte colaboré con la pintura, con el entusiasmo que tenía, lo pinté en una mañana… Luego se dio terminación con cerámicos en tonos marrones y naranja en la base, y el techo dio el toque final. Se realizó en madera para combinar con la decoración del jardín y chapa de fibra blanca para los cactus tuvieran el sol necesario sin sufrir quemaduras. Y de verdad que lo agradecen día a día, se nota al verlos tan sanos y lindos que les gustó mucho su nuevo hogar…
Espero que te hayan gustado mis cactus, y si querés que siga escribiendo este tipo de publicaciones, me escribas un comentario o un mensaje en mi Fanpage. Te invito a ver más imágenes hermosas de cactus y un poquito más de mi mundo en Instagram.
Hasta la próxima!! ♥
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