Estamos en otoño, pero en esta zona donde vivimos o hace mucho frío o hace mucho calor, no conocemos las estaciones de entretiempo ( primavera y otoño ).
Así que para nosotros ya llegó el invierno. Todavía no han llegado los días de temperaturas de 3 grados o por debajo de 0, pero ya están aquí los días tristes de niebla que no nos dejan ver el sol.
Amanecimos con el cielo cubierto por la niebla, pero el huerto nos esperaba.
Hemos dado por terminada la temporada 2016.
Empezamos arrancando las calabaceras que quedaban, y nos llevamos las calabazas a casa para guardarlas en el granero para consumir durante el invierno.
Todavía quedaban unas pocas tomateras, que también decidimos arrancarlas, porque aunque las matas tenían un verde lustroso los tomates aunque rojos no estaban sanos.
Dejamos los pimientos italianos, que están llenos de pimientos que estamos recolectando, y aunque tienen flores dudo que lleguen a término.
Las pimenteras no nos estorban ahora ni para futuras siembras, y sabiendo por experiencia propia que las matas de pimiento duran hasta 4 años (aunque haya sido en invernadero, tampoco perdemos nada por intentarlo en el exterior), hemos pensado dejarlas de un año para otro a ver qué ocurre.
Labramos todos los espacios de tierra sin cultivar, para que de cara al invierno la tierra se quede labrada y el frío mate las raíces de mala hierba y de malas plagas que hemos sacado a la superficie al labrar.
Por la tarde esclareció el cielo y pudimos ver el sol.
Con la tierra trabajada plantamos unas pocas borrajas y cebollino para cebolla tierna, que compramos en Huerta Barbereta ( Huesca ).
Así que oficialmente damos por concluida la temporada 2016 y ponemos ya nuestros pensamientos en la temporada 2017.
Ya queda nada para empezar a preparar plantearos en Enero
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