¿Crees en las cualidades místicas que puede poseer la naturaleza? Pues probablemente, conozcas la simbología de las plantas y tengas fe en sus propiedades. Así que hoy te traemos algunas plantas que pueden traer múltiples beneficios a tu vida:
Bambú de la suerte
Por muy contradictorio que suene, en realidad, no es un verdadero bambú, sino una especie propia de otra familia (concretamente, las asparagáceas). Esperamos no haberte roto el corazón. Aunque sea una pequeña planta impostora cumple -al cincuenta por ciento- con su nombre coloquial, pues se dice que transmite una considerable cantidad de energía positiva. Resulta agradable a la vista y le favorece la escasa luz que suele haber en interiores. ¿Qué más necesitáis?Trébol
El trébol de cuatro hojas es el adalid de la suerte, una leyenda que todos conocemos. Más allá de las historias que rondan en torno a él, hay quienes defienden que colocar uno en casa puede augurar grandes logros. Aguantará en exterior, aunque se desarrolla mejor en interior. No tendrán cuatro hojas, pero siempre te podemos escribir un post con los mejores tipos de pegamento;)Cactus
El Feng Shui incide en que el lugar donde ubiques el cactus es crucial para obtener esa buena suerte, puesto que, en determinadas zonas, puede tornarse en una corriente negativa, produciendo un efecto totalmente opuesto al deseado. Pero los miembros de la secta adoradora del cactus nos negamos de manera contundente a que se mancille la imagen de nuestras pequeñas suculentas. Así que la clave está en colocarlos en lugares concretos como exteriores, en el trabajo o lejos del dormitorio.Pachira aquatica
También conocida como Castaño de Guinea. Es un árbol caracterizado por la forma trenzada de su tronco. La tradición apunta a que funciona como un método de atracción para la fortuna y los negocios. Así que si no eres muy escéptico, no estaría de más hacerte con una para tu salón. Necesita mucha luz, pero es capaz de sobrevivir en zonas donde le dé sombra parcial. Hay que prestar especial atención a la temperatura del entorno.¡Nosotros ya tenemos nuestra buena suerte! ¿Y tú?