Planta conocida popularmente como Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
La Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
Solanum pseudocapsicum es una planta arbustiva que pertenece a la familia Solanaceae. Es una especie de pequeño porte que a pesar de ser un arbusto, no alcanza más de 1.50 metros de altura. Los tallos son delgados, semileñosos, ramificados y con crecimiento erecto. Las hojas son oblongas y simétricas con el margen generalmente entero aunque podemos encontrar algunas irregularidades (ondas) y peciolos pequeños. Posee diferentes tonalidades del color verde en el haz y envés de las hojas (más oscuro en el haz que en el envés).
Las flores son pequeñas (2-3 cm de diámetro) y surgen solitarias o en grupos de 3 (Aparecen en las axilas de las hojas). Son blancas (pétalos) con estambres amarillos muy pronunciados (flores características de las solanáceas). La época de floración comienza a finales de primavera y continúa en verano para la posterior fructificación.
Frutos en diferentes estados de maduración de la Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
Lo más llamativo de esta especie radica en la aparición de los frutos; son numerosos y con colores muy atractivos. A finales de verano empieza la época de fructificación apareciendo pequeños frutos redondos y verdes. Con el tiempo los frutos crecerán y cambiarán de color a naranja claro hasta llegar al rojo (maduración completa). En la época de septiembre a diciembre podremos observar esta planta completamente llena de frutos en diferentes estados de desarrollo (frutos rojos, naranjas y verdes) haciendo a la planta muy atractiva. Los frutos son muy confundidos con tomates pequeños o cerezas por su forma redonda (parecen pequeñas bayas) y colorido.
¡¡¡OJO!!! Aunque los frutos pueden ser muy llamativos, son altamente venenosos (presencia de un alcaloide tóxico llamado Solanocapsina) si son ingeridos; recordemos que casi todas las plantas de la familia Solanaceae son muy venenosas. Debemos tener mucho cuidado con los niños.
Distribución geográfica y nombres comunes de Solanum pseudocapsicum
Solanum pseudocapsicum es originaria de la región sur de América y se ha distribuido por casi todo el mundo como planta ornamental. Existen en la actualidad muchos viveros encargados en su reproducción con fines comerciales.
Vista superior de la planta Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
La forma de sus frutos ha provocado que esta planta sea llamada de múltiples formas en distintas regiones del mundo. Ejemplos de estos nombres: Cereza de Jerusalén, Cereza falsa, Falso pimientos, Naranja de jardín, tomatillo, Manzanitos de amor, Trompillo, Revienta caballos, entre otros.
Consejos para el cultivo de la Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
Esta especie no es muy complicada de cultivar si crece en climas tropicales pero es bastante susceptible a las regiones templadas. Para que esta planta crezca sana debemos seguir los siguientes aspectos:
Iluminación: Debemos cultivar en lugares muy iluminados o a pleno sol. Crece mejor con algunas horas de sol y sombra al día.
Temperatura: Debe crecer en climas cálidos y estables durante todo el año. Lo óptimo serían temperaturas entre los 20-30 °C durante todo el año. Esta especie logra soportar pequeñas
temporadas de heladas pero temperaturas inferiores a los -3 °C pueden pudrir sus raíces con el tiempo.
Frecuencia de riego: Regar periódicamente manteniendo el sustrato húmedo (evitar el encharcamiento); en la época de crecimiento (invierno-primavera) con mayor frecuencia. Si el verano es muy caluroso debemos vigilar el sustrato y evitar que se seque (puede matar la planta).
Numerosos frutos en una rama de la Cereza de Jerusalén, Solanum pseudocapsicum
Sustrato: Debemos proporcionar un sustrato rico en materia orgánica y hormonas de crecimiento (se puede lograr aplicando humus de lombriz cada 15 días). También el sustrato debe tener un drenaje perfecto (mezclar tierra con arena y piedrecillas para mejorar el drenaje). El PH de la tierra debe ser ligeramente ácido.
Plagas y enfermedades: Las plagas más comunes son los áfidos (pulgones) que debemos controlar con insecticidas. Las enfermedades comunes son patologías y pudriciones en raíces y hojas producto de la aparición de hongos por exceso de humedad.
Multiplicación: Esperar que los frutos caigan al suelo y recoger las semillas que se encuentran en su interior. Dejarlas secar y sembrar preferiblemente entre marzo y junio. También podemos reproducir por esquejes del tallo utilizando hormonas de enraizamiento.
Dónde sembrar: Esta planta se desarrolla muy bien en macetas de barro pero en dependencia de su crecimiento, debemos replantarla a una más grande.
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