(Imagen/ Flickr: Nuuuuuuuul)
Aprender a podar el aligustre se necesitan varias técnicas para no deteriorar nuestro arbusto. Ya que, el aligustre es un árbol perenne que crece tanto a pleno sol como en la sombra. Se adapta casi sin problemas a todo tipo de suelos y, además, es muy resistente a la contaminación.
Uno de los beneficios de podar al aligustre es que luego de hacerlo, nacen flores con más rapidez. (En esta página te contamos todo sobre la poda).
Este proceso de podar el aligustre ha de realizarse al menos tres veces al año, principalmente en primavera, verano y otoño.
Resulta muy útil en pequeños jardines, y si se le recorta es bastante fácil conseguir setos formales o informales, según el gusto y la experiencia de cada uno.
(Imagen/ Flickr: Alois Staudacher)
Poda formal
Se utiliza principalmente con plantas tupidas que toleran o requieren de podas habituales, como es el caso del Aligustre.
Cuando vayas a realizar este proceso es importante que tengas en cuenta un aspecto: intenta que la base de la planta quede más ancha que la parte superior. Con esto conseguirás que la luz entre mejor a cada rincón de la planta. Además, evitarás que la planta sufra en el caso de que se deposite la nieve en ella.
Por otro lado, la poda formal permite conseguir un efecto de delimitación magnífico en jardines, separar zonas o incluso aislarlo del exterior.
También, a la vez, conseguirás una protección extra para el resto de plantas o flores que estén cercanas a este seto.
(Imagen/ Flickr: Gonmi)
Poda informal
El Aligustre también se puede podar de manera 'informal' aunque, sin lugar a dudas, es más recomendable la mencionada anteriormente.
Se consigue podando únicamente cuando el arbusto lo requiere, y no forma ninguna pantalla ni se persigue ninguna forma regular. Es ideal para que lo realicen aquellas personas con poca experiencia en jardinería.
Es recomendable utilizar este tipo de recorte en arbustos o plantas que mantienen durante su crecimiento una forma más o menos definida.