Cordia sebestena es una planta tropical de la familia Boraginaceae muy conocida en las Antillas y en el continente americano por su resistencia, floración perenne y como planta medicinal. Es muy común en las carreteras y parques de muchos países de América pero su distribución se ha expandido a otros continentes por su valor ornamental.
Flores del Árbol o Arbusto Nomeolvides, Cordia sebestena
Esta especie se caracteriza por formar pequeños árboles (pueden sobrepasar los 6 metros de altura) o arbustos medianos. Los tallos son leñosos y con textura muy irregular y bastante ramificados. La coloración de los tallos más jóvenes es verde clara mientras que los más antiguos son de color pardo oscuro.
El follaje de esta planta se mantiene durante todo el año. Las hojas son redondeadas en la base con el ápice ligeramente agudo y pueden alcanzar +/- 15 cm de largo por +/-10 cm de ancho. Además presentan una coloración verde clara con los nervios más oscuros y conspicuos. Todas las hojas presentan un pequeño peciolo (+/- 2cm de largo), tienen numerosos tricomas (pelos) en el haz y pocos tricomas en el envés.
Frutos inmaduros del Árbol o Arbusto Nomeolvides, Cordia sebestena
Las flores se organizan en inflorescencias cerradas que surgen de las regiones subterminales de los tallos. Cada inflorescencia puede generar más de 10 flores que abren generalmente juntas. Las flores son muy llamativas debido a su coloración naranja-rojiza (la corola). Tienen forma de embudo (infundibuliforme) el cual mide de 2-6 cm de largo. Los estambres son visibles con variaciones en el número (pueden haber de 5-7).
La época de floración en países tropicales puede abarcar todo el año.
Los frutos son drupas que cuando son inmaduras, tienen su región basal más ancha que la apical y son de color verde. Mientras van madurando los frutos se hacen más globosos y toman una coloración blanca amarillenta. El fruto maduro es aromático y comestible (no tiene buen sabor).
Frutos maduros del Árbol o Arbusto Nomeolvides, Cordia sebestena
Consejos para el cultivo del Árbol o Arbusto Nomeolvides, Cordia sebestena
Cordia sebestena es muy fácil de mantener en el jardín debido a que es súper resistente a las sequías y a las plagas. A continuación les compartimos sus cuidados:
Iluminación: Necesita cultivarse a pleno sol para crecer saludable y florecer durante todo el año. Evitar cultivarla en lugares umbríos porque puede crecer exageradamente y no florecer.
Temperatura: Requiere climas suaves y cálidos durante todo el año. No tolera temperaturas inferiores a los 5°C. Su rango óptimo está entre los 15-30°C.
Sustrato: Es muy tolerante a una amplia variedad de sustratos con la condición fundamental de que tengan un óptimo drenaje. Evitar sembrarla en suelos compactos y con poca permeabilidad.
Vista del Árbol o Arbusto Nomeolvides, Cordia sebestena
Frecuencia de riego: Cuando es una planta pequeña se debe regar con frecuencia en dependencia de las temperaturas ambientales. Regar en verano de 2-3 veces por semana y 1 vez en invierno. Cuando alcanza más de 1 metro de altura suele sobrevivir con el agua de las lluvias ocasionales.
Poda: Podar en Primavera para cortar las ramas poco llamativas y darle la forma deseada.
Plagas y enfermedades: Es muy resistente a las plagas pero susceptible al frío y encharcamiento del agua. Evitar exponerla a climas con inviernos fuertes porque morirá.
Multiplicación: A partir de esquejes de tallos verdes. Estos deben ser sumergidos en hormonas de enraizamiento y sembrados en un suelo suelto y rico en materia orgánica. También se multiplica por semillas.
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