Hola, soy Tximo Gracia, creador de jardindeacero.com, y quiero compartir contigo la experiencia que he acumulado en los últimos 13 años acerca del uso de bancales elevados, tanto para horticultura como en jardines decorativos.
En esta ocasión te quiero hablar del útlimo tipo de bancal con el que he experimentado y que en mi opinión es el mejor: el bancal elevado de acero cortén.
Bancales elevados de acero cortén
Durante estos años dedicándome como aficionado a cultivar hortalizas y otras plantas en el jardín de mi casa he estado permanentemente buscando una manera óptima de crear bancales elevados, lo cual significa probar con distintos materiales y sistemas que he ido explicando en los anteriores posts. (ir al primero)
Pero no sólo se trataba de buscar una manera práctica y eficaz de hacer bancales y jardineras de gran tamaño. Poco a poco me fui volviendo más exigente, también quería que tuviera clase.
El ladrillo cerámico es lo más práctico y económico, pero la estética deja mucho que desear. La madera, especialmente las traviesas de tren, casi cumplían mis expectativas en cuanto a estética, pero surgieron los problemas que ya conté en el post dedicado a los bancales elvados de madera y que se resumen en uno: la madera, incluso la tratada, se deteriora muy rápido. Eso significa que a los pocos años hay que sustituirla o llevar a cabo un mantenimiento que no es nada fácil ni barato.
El acero cortén es para siempre
Es indiscutilblemente lo más resistente que hay, no se va a romper ni agrietar ni deformar aunque le des un golpe con la carretilla o el cortacésped ni le van a afectar las heladas ni va a coger hongos ni se va a pudrir, aunque seguramente ya habrás pensado que se oxidará. Efectivamente, pero en el caso del acero cortén, eso no es un problema, sino una virtud.
El acero normal y corriente (conocido como acero al carbono) se oxida, y con el tiempo la corrosión avanza hasta convertirlo en herrumbre. Quizá para cuando un bancal o jardinera de acero al carbono se desmorone debido a la corrosión, tú mismo ya te hayas convertido en material compostable, pero eso no me atrevo a asegurarlo.
El acero cortén se oxida igual que el acero normal, pero con la diferencia de que el óxido forma una capa impermeable que protege el interior, con lo cual, llega un momento en que deja de oxidarse. Esto mismo ocurre con el aluminio (todo el aluminio que veas está oxidado), sólo que en el caso del acero cortén es un proceso muy lento (más de un año).
Un material unido al diseño de vanguardia, al arte y al lujo
Te habrás dado cuenta ya de que el acero cortén es un material muy apreciado por arquitectos, diseñadores y artistas, con el que se construyen fachadas de edificios, viviendas de lujo, grandes esculturas (¿qué hubiera sido de artistas como Chillida sin este material?) y muchas otras cosas, siempre de categoría premium, por así decirlo.
No es de extrañar que la presencia de este acero en nuestro jardín nos produzca una sensación de confort, de importancia, de relevancia social, como la que tenemos cuando nos movemos en un coche lujoso, viajamos en primera clase o nos alojamos en un hotel de 5 estrellas.
¿Y no se calentará mucho?
La temperatura que puede llegar a coger el metal es el único inconveniente que se le puede encontrar. Si te quieres sentar sobre él un 15 de Julio a las cuatro de la tarde te quemarás el culo, pero, ¿quien tiene ganas de salir al jardín a 38ºC?
Es innegable que una pared metálica supone un aislamiento térmico nulo, y podrías pensar que convendría añadir algún material aislante en el interior del bancal, pero después de algunos experimentos he comprobado que da igual si lo haces o si no.
Tendemos a pensar que la pared metálica recalentará la tierra a una temperatura muy alta, pero no ocurre así. Como he dicho antes, si tocas la chapa de acero a pleno sol un día de verano te quemarás, pero bastará que separes la mano un par de centímetros (o menos) para que no notes nada. Lo mismo ocurre en el interior. La superficie del metal está muy caliente (o fría en invierno), pero a menos de un centímetro la temperatura será normal.
Que notes el metal muy caliente o muy frío sólo responde a la facilidad con la que el metal conduce el calor, no significa que el metal esté generando calor.
Vale muy bonito, pero …
Si quieres hacer tus bancales elevados con acero cortén, que a estas alturas seguro que quieres, tienes un problema grave que no he mencionado aún pero que te estarás imaginando hace rato. Al igual que pasaba con la estructura de acero para reforzar el bancal cerámico de doble altura (te recuerdo mi post sobre bancales cerámicos) necesitas un profesional que te los instale en tu casa.
Si ya por sí solo el acero cortén es un material costoso en relación con las otras opciones (aunque más barato que la madera si metemos el nulo mantenimiento en la ecuación) imagínate si tienes que recurrir a un profesional cualificado para que te fabrique tus bancales a medida y en tu propia casa, porque evidentemente, un bancal de un tamaño normal es un trasto enorme que pesa un quintal y no hay quien lo transporte a tu casa un precio asumible.
Además en mi caso se me plantea otro problema ahora que planeo mudarme de casa: ¿qué hago con mis bancales? ¡No me puedo llevar esos mastodontes de 4 y 5 metros de ninguna manera!
Pero, como quizá hayas imaginado por el camino, después de tantos años de pruebas y experimentos, he creado un sistema de bancales modulares que resuelve de manera sencilla los problemas de peso, transporte e instalación, y he creado esta web para ofrecértelo a ti, que evidentemente, si has leído hasta aquí, compartes conmigo aficiones y gustos estéticos.
Bancal Modular de Acero Cortén (BMAC)
Con este sistema puedes comprar online un kit de 6 piezas para montar tu bancal de acero cortén, eligiendo entre dos alturas diferentes (25 y 50 cm), y con la posibilidad de hacerlo más largo con un kit de extensión.
Cuando te lleguen a casa podrás llevar las piezas a su emplazamiento definitivo sin problemas ya que la más grande (150 cm de largo) pesa unos 10 kg, un peso considerable pero manejable para casi cualquier persona.
Una vez en su sitio sólo tienes que unir las piezas con los tornillos y tuercas de acero galvanizado incluidos en tu kit en menos de 10 minutos. Puedes ver el proceso en este vídeo.
Te puedo asegurar por propia experiencia que el aspecto de tu jardín dará un salto cualitativo enorme cuando el acero empiece a tomar su color característico (si les das un manguerazo a diario, en unos días tendrán una pinta de auténtico lujo)