¿Qué necesitan las plantas?
Una planta, para crecer fuerte y libre de enfermedades, necesita tres nutrientes principales, el nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K). Cada uno contriube a una función o parte de la planta, por ejemplo el nitrógeno es necesario para que se desarrolle bien y tenga un buen follaje. Para sus flores y frutos necesitan fósforo y el potasion las fortalece y mantiene sanas.
Posos de café
Los posos o restos de café que generamos en casa podemos utilizarlos para fertilizar nuestras plantas y mejorar notablemente la estructura del suelo. El aporte de estos restos vegetales beneficiará muchísimo a nuestras plantas, ya que será una fuente rica en nitrógeno, pero recordad no aportar en exceso porque este aumenta la acidez del suelo.
Cáscaras de huevo
Mucha gente ya conoce este truco, sin embargo, para aquellos despistados que todavía no lo conocen, cabe destacar que las cáscaras de huevo contienen calcio, un mineral muy importante para la formación de células vegetales. Es importante decir que este calcio solo estará disponible si tenemos un suelo algo ácido. Por si tenéis dudas, en el este vídeo os lo explico con un poco más de detalle.
Como véis, no es aconsejable creer cualquier página, artículo, o vídeo de internet, donde se dice, sin ninguna prueba ni base cientifica, que el calcio de las cáscaras de huevo, mágicamente, pasan a disponibilidad de las plantas. Así que os insisto en que, si no téneis un suelo ácido, mi consejo es que apliqéis las cáscaras a una compostera donde seran de mayor utilidad.
Piel del plátano
Lo normal es tirar las pieles del plátano debido al desconocimiento de la magnífica cantidad de potasio, fósforo y calcio que estas contienen. Lo mejor de las cáscaras de plátano es que, simplemente, las enterramos cerca de cualquiera de nuestras plantas y estas se descomponen muy rápidamente, siendo un aporte de nutrientes muy efectivo.
Cortes y restos de césped
Los restos de césped son muy ricos en nitrógeno. Para prepararlos, llenaremos un recipiente de una capacidad de 15 litros con los restos de este, a continuación, añadiremos agua y lo dejaremos reposar dos dias. Pasados estos dias, diluiremos el té de hierba en una proporción de 1:10, es decir, un vaso de té por cada 10 de agua.
Sales de Empson o sulfato de magnesio
Este producto se compone de magnesio y sulfato y, lo mejor, es económico. Estas sustancias pueden incrementar la producción de clorofila y ayudar a que las plantas usen mejor el fósforo y el nitrógeno que tiene disponible. Solo necesitaremos una cucharada de sal de Epsom por cada 4 litros de agua.
Orina humana
Puede sonar muy repugnante, pero la orina humana se considera estéril si el cuerpo del que procede es de una persona saludable que no toma medicamentos ni posee ninguna enfermedad.
La urea como tal posee un contenido en nitrógeno, fósforo y potasio más alto que los fertilizantes que se venden en las tiendas, por tanto, es otra opcion económica y ecológica. Sin embargo, si os pasa como a mi, que me da un poco de reparo utilizarlo como fertilizante orgánico, podéis realizar lo mismo que yo, la diluyo en agua en una proporcion de 1:8 para luego colocarla poco a poco en la pila de compost y enriquecerlo.
Para terminar os dejo con un vídeo donde explico por qué uso en mi huerto posos de café y las consecuencias tan beneficiosas que este me produce como, por ejemplo, el aumento de la población de las lombrices. Por último, si os ha resultado de utilidad el artículo, no olvidéis compartirlo en vuestras redes sociales, para que otros se puedan beneficiar de esta información.