La clave para decorar el entorno que rodea a una piscina es utilizar plantas resistentes capaces de crecer en el microclima de una piscina, normalmente ubicada con plena exposición solar, y que sean capaces de ofrecer un entorno que nos recuerde a un ambiente selvático y tropical, propio de los países del sudeste asiático.
En este artículo hemos elegido algunas plantas para piscinas que mejor se pueden adaptar a este tipo de entornos y que pueden crear un paisaje totalmente tropical y paradisiaco. Además, tienen buena rusticidad y se adapta bien a las condiciones habituales de este tipo de espacios de jardín.
En nuestra cabeza concebimos varios espacios en el entorno de una piscina, donde sí o sí las plantas tienen mucho que decir. El césped es uno de ellos, pero lo vemos más como un complemento que como una solución única. Cubres grandes espacios de suelo para la diversión de niños y mascotas, pero se te quedan entornos vacíos que piden a gritos incorporar otras especies de plantas.
Dependiendo de tus gustos, puedes elegir un espacios xerófito para tu piscina, eligiendo plantas de bajas necesidades hídricas, con tonalidades marrones (gramíneas y cereales), verdes grisáceas (plantas desérticas y suculentas) y combinarla con arbustos de mayor tamaño y de bajo mantenimiento (Juniperos y otros).
Por otro lado, quizá busques un entorno más tropical, con plantas de mayor volumen y vegetación, hojas grandes y espacios de sombra, donde puedes incluir varias especies del género Musa (plataneras), Alocasias, etc.
Tipos de espacios para piscinas
Dependiendo de la zona donde nos encontremos, principalmente podemos elegir entre un estilo tropical, un estilo de piscina mediterránea y un estilo neutro (un poco de todo). Vamos a analizar cada una de ellas.Piscina de estilo tropical
Una de los estilos de entornos de piscina que más fama está cogiendo el estilo tropical. Un entorno que intenta imitar las zonas tropicales del sudeste asiático (Tailandia, Vietnam, Filipinas y principalmente Bali), con zonas de sombra, plantas de porte alto pero con mucha ramificación herbácea y menos tallos de madera.
En este tipo de espacios elegimos plantas que suelen necesitar temperaturas cálidas casi durante todo el año y su principal debilidad es el frío, por lo que nuestro jardín debe estar ubicado en una zona cálida durante la mayor parte del año.
En la elección de plantas para este entorno destacan aquellas siempreverdes de hojas grandes (alocasias, helechos, trepadoras, plataneras y otras) combinadas con palmeras tropicales como el coco plumoso, palmera ahusada, palmera real australiana, etc.).
Junto con estas plantas, destaca también el uso de la madera y la creación de paredes verdes que todavía ofrezcan un punto adicional de sombra.
Piscinas de estilo mediterráneo
La piscina mediterránea suele buscar tonalidades blancas y plantas con tonalidades verdes oscuras y grisáceas. Destacan por elegir especies de bajos recursos, jugando con plantas de porte bajo, como suculentas y gramíneas, con un segundo plano de grandes árboles como coníferas y especies palmáceas.
Suele coincidir este tipo de jardinería con la elección de especies xerófitas, es decir especies acostumbradas a entornos hostiles, casi desérticos, con muy bajos recursos hídricos, como cactus y suculentas.
En la imagen podemos ver la elección de plantas para piscinas en zonas desérticas con una excelente combinación de cactus de porte alto (nopales, saguaro, cactus de San Pedro), con palmáceas enanas.
Tipos de palmeras de gran porte para el entorno de tu piscina:
Palmera canaria o palmera datilera
Washingtonia robusta
Livistona rotundifolia Listado de plantas para piscinas con buena adaptación
Género Musa (plataneras)
Cuando buscamos un valor añadido para el entorno de nuestra piscina, con tonos tropicales y plantas de mayor envergadura y hojas voluminosas, el género Musa nos puede proporcionar algunas especies interesantes. Este género engloba las conocidas como plataneras, plantas que necesitan condiciones cálidas durante todo el año y buena exposición lumínica.
Su crecimiento es rápido y pueden proporcionar zonas de sombra para la piscina. Si disfrutas de un entorno cálido, cercano a la costa o zona mediterránea o isleña en España, te puedes permitir el lujo de cultivar la platanera.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: entorno de sombra o semi sombra, temperaturas cálidas durante todo el año y protegida de vientos fuertes.
Tipo de suelo: suelo profundo rico en materia orgánica, buen drenaje y tipo suelto.
Riego y abonado: riego constante durante los meses más cálidos, abonando a finales de invierno para estimular la brotación de nuevas hojas.
Mantenimiento: constante durante todo el año, guiando el desarrollo de sus hojas y podando aquellas que se encuentren caídas, rajadas o con viejas.
Hibisco (Hibiscus rosa-sinensis)
Cuando buscamos arbustos de gran envergadura, buena resistencia y una fantástica floración, el hibisco puede ser una opción interesante de plantas para piscina. Se adapta muy bien a entornos cálidos y muestra su vigorosa floración durante la primavera y verano.
Para el cultivo de la rosa de China, el entorno tropical es el idóneo, pero si no vives en él (como mucha gente), unas condiciones invernales suaves pueden ser toleradas por la planta, con un entorno de plena iluminación y alejada de vientos fríos.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: resiste bien el frío, creciendo de forma óptima en zonas más húmedas y temperaturas de 15-25 ºC. Se cultiva a pleno Sol.
Tipo de suelo: suelo con buen drenaje y fertilidad media. Se cultiva directamente en el jardín.
Riego y abonado: riego constante y aplicación de fertilizantes cada 15 días en primavera y verano.
Mantenimiento: poda al final del periodo estival recortando brotes viejos, eliminando flores pasadas y guiando su crecimiento.
Ave del paraíso (Strelitzia reginae)
Una planta de exterior que ha ido ganando adeptos año tras año es la conocida como ave del paraíso. Perfecta como planta para piscinas en entornos cálidos, vigorosa y de rápido crecimiento, y con una floración atractiva que nos recuerda a la cabeza de un pájaro (de ahí su conocido nombre).
Se puede cultivar tanto en macetas en interior como en jardineras o directamente en la tierra en exterior, refugiada de vientos fuertes e inviernos fríos.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: espacios soleados, cultivo a pleno Sol o semisombra, protegida del viento y zonas cálidas. No tolera heladas.
Tipo de suelo: suelo con buen drenaje y fertilidad alta. Puede cultivarse en macetas o recipientes.
Riego y abonado: riego constante en primavera y verano (2 o 3 veces por semana). Abonado cada 2 semanas a final de invierno (relación NPK 2-1-2,5 con micros).
Mantenimiento: eliminación de hojas antiguas y excesivamente abiertas y separación de hijos.
Papiro Egipcio (Cyperus papiro)
Buscando un ambiente selvático con plantas que suelen crecer en la orilla de los ríos, el papiro egipcio es una planta totalmente adaptada a condiciones de humedad y presenta buena resistencia. Crea un ambiente exótico y tropical, y puede crecer en todo tipo de suelos, especialmente aquellos que retienen bien la humedad (arcillosos).
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: zonas sombrías (o semi sombra), entorno húmedo y alta tolerancia a diferentes temperaturas.
Tipo de suelo: suelo rico en materia orgánica, con buena capacidad para conservar humedad.
Riego y abonado: riego constante, necesitando humedad en el suelo. Abonado de baja cantidad en primavera y verano.
Mantenimiento: poda de hojas abiertas y antiguas, recortando los tallos a pocos centímetros del suelo.
Agave (Agave attenuata)
En el listado de plantas que toleran cualquier tipo de exposición y clima cálido, el género Agave nos ofrece diferentes variedades. Agave attenuata puede cultivarse tanto en macetas como en suelo directo.
Sus fantásticas hojas verde grisáceas, aspecto coriáceo y bajos cuidados ofrece una gran alternativa para las esquinas de los entornos de la piscina donde busquemos un paisaje más xerófito, con especies de bajo consumo hídrico, sustrato superior de grava y especies perennes.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: inviernos suaves y calurosos. Exposición total al Sol.
Tipo de suelo: suelos drenantes, arenosos y con muy buen drenaje.
Riego y abonado: riegos muy limitados, 1 vez por semana en verano y cada 15-20 días en invierno. Abonado en primavera y verano para estimular la brotación, en poca cantidad.
Mantenimiento: bajo mantenimiento con poda al final del verano para limpiar el tronco.
Schefflera
Schefflera es muy conocida como planta de interior, aunque lentamente se ha adaptado muy bien a zonas generalmente cálidas y zonas costeras. Se utiliza en entornos de piscina por el extra de humedad que recibe y cuando buscamos especies de mayor tamaño (supera el metro de altura sin problemas), en zonas más sombrías.
Es una planta siempreverde, por lo que combina perfectamente con especies tropicales florales y arbustos de floración.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: temperaturas cálidas y rango óptimo (13-25 ºC). Zona protegida de corrientes de aire y ubicación en semi sombra, libre de heladas.
Tipo de suelo: rico en materia orgánica, profundo y bien aireado.
Riego y abonado: resistente a la falta de agua, riegos moderados. Abonado en primavera (NPK 15-5-30 con micros) y durante todo el verano para estimular la brotación.
Mantenimiento: bajo mantenimiento. Poda a final de verano eliminando tallos torcidos, hojas marrones y guía de crecimiento.
Pennisetum Rupelli
Cuando buscamos una planta herbácea tipo gramínea que cubra un buen hueco en cualquier zona de la piscina y ofrezca un paisaje cálido propio de un jardín mediterráneo, Pennisetum Rupelli es una gran opción.
Posee un desarrollo todoterreno y muy bajas necesidades de mantenimiento, con alta resistencia a la sequedad ambiental, alta tolerancia al estrés hídrico y espacios muy bien iluminados.
Podemos cultivar esta planta para piscinas directamente en el suelo o en grandes maceteros y jardineras. La gran brotación que emite y la caída de sus tallos hará desaparecer visualmente el recipiente.
Condiciones de cultivo:
Ubicación y clima: espacios soleados y ambientes cálidos y semi-desérticos. Exposición a pleno Sol
Tipo de suelo: suelo de tipo medio, buen drenaje y no necesariamente fértil.
Riego y abonado: riego a la mínima expresión, con aportes de agua semanales y de baja cantidad. No requiere abonado salvo la recuperación del suelo con compost o materia orgánica
Mantenimiento: mantenimiento nulo. Poda cada varios años si deseamos reducir su frondosidad.