Se dice que en los países en que la población se alimenta esencialmente con cebolla, los tumores son casi desconocidos y la gente goza de buena salud hasta edad muy avanzada. Los antiguos egipcios adoraban las cebollas como algo sagrado y las utilizaban en medicina especialmente para las afecciones de la vejiga y del riñón. También hoy en día, en la sencilla, pero aún válida medicina casera, este modesto bulbo goza de gran estima y es muy utilizado como estimulante de la actividad renal, como calmante, emoliente, expectorante y, por último, para tratar eficazmente las infecciones intestinales, malas digestiones, estreñimiento, constipación, hemorroides, callosidades, sabañones, picaduras de abeja, lombrices, refriado, tos y hemorragia nasal.
Planta bianual, de la familia de las Liliáceas, contiene gruesos bulbos que dan vida a un penacho de hojas carnosas, huecas y cilíndricas. Las flores, numerosas y pequeñas, agrupadas en esfera sobre un largo tallo erecto, florecen durante los meses de junio y julio. Es originaria de Persia y se cultiva en las huertas de toda España, de norte a sur y de este a oeste.
Partes utilizables de la planta: el bulbo.
PREPARACIONES
Callosidades
Infusión: hervir en un vaso de vinagre una cebolla cruda y cortada a rodajas. Dejar templar el líquido y, después verter la infusión en un colador, aplastando la pulpa de la cebolla hasta salir todo el zumo. Recoger el líquido en una cazuela y utilizarlo para emplastos, aplicados sobre las callosidades, mediante trocitos de gasa.
Diurético
Infusión de vino: poner en infusión en medio litro de vino blanco de buena calidad 250 g de cebollas frescas cortadas a rodajas y 80 g de miel. Al cabo de 24 horas, filtrar el líquido y beberlo a cucharadas antes de las comidas.
Tintura: triturar 100 g de cebolla fresca y, procurando no desperdiciar el zumo, verterlo en una botella junto con 100 g de alcohol de 90º. Después de 24 horas, filtrar el líquido y conservarlo en un frasquito con tapón esmerilado. La dosis, es una cucharadita antes de las comidas.
Estómago (digestión)
Tintura: ver diurético. El preparado debe tomarse en las dosis indicadas.
Hemorragia nasal: partir en dos una cebolla fresca y aspirar su zumo por la nariz. La salida de sangre cesará rápidamente.
Hemorroides
Ungüento n.1: cocer una cebolla en un poco de aceite de linaza, dejarla enfriar y machacarla para que la pulpa y el zumo se mezclen bien con el aceite. El ungüento así obtenido, se aplica sobre las hemorroides para calmar el dolor y quitar la inflamación.
Ungüento n.2: análogos resultados se obtienen machacando una cebolla cruda, mezclándola con un pedacito de mantequilla y aplicando la pasta sobre la parte enferma.
Intestino (infecciones)
Decocción (contra el estreñimiento): cortar una cebolla a rodajas, cocerla en medio litro de agua edulcorada con miel, filtrar el líquido y beber una taza por la mañana, y una por la noche. Otro sencillo y eficaz remedio para combatir el estreñimiento consiste en comer dos veces al día, media cebolla asada bajo ceniza caliente.
Lombrices
Infusión: en una cazuela, verter un cuarto de litro de agua y una gruesa cebolla cortada a rodajas. Dejarla en maceración durante la noche, después pasar el líquido a través de un colador aplastando la cebolla para exprimir todo el zumo. Beber la infusión en ayunas
Picaduras de abeja: para clamar el dolor provocado por una picadura de abeja, frotar sobre la parte atacada, una cebolla cortada.
Resfriado, Tos
Infusión: cocer una cebolla cortada a rodajas en una taza de leche edulcorada con miel y beber la infusión caliente antes de acostarse. Jarabe: cocer 1 kg de cebollas frescas en 300 g de miel, 750 g de azúcar y un litro de agua. La cocción debe ser a fuego lento durante tres horas, pasadas las cuales, se deja enfriar el compuesto antes de filtrarlo a través de un cedazo. El jarabe, conservado en una botella, se toma a cucharadas.
Sabañones
Ungüento: aplastar una cebolla fresca para extraer su zumo y mezclarlo con media cucharadita de lanolina. Friccionar con este ungüento, por lo menos dos veces al día, las manos y los pies con sabañones.
VETERINARIA
Pollos – Suministrándoles dos o tres veces a la semana una cebolla por cabeza, se previenen las enfermedades infecciosas.
Usos caseros
Marcos dorados: para mantener alejadas las moscas de los marcos dorados, basta frotar la superficie, con una cebolla cortada, cuyo zumo, además, no altera el dorado.