Yo era una urbanita más auténtica que un semáforo. Pero un día descubrí que las patatas no nacían en bolsa en el supermercado, y ante mí se abrió un mundo de posibilidades y aprendizaje al pisar el huerto.
Hace años, cuando empecé el blog, mi intención era esa, escribir un blog que en inglés significa “Diario”.
Llevaba años cultivando un huerto; anotaba todo lo que sembraba y hacía en el huerto, en papeles y cuadernos por todos lados, y luego los iba guardando tanto que no sabía ni donde los guardaba, así que no me servían para llevar un control de nada.
Así que decidí empezar un blog, este blog, ” Diario de Siembra”.
Mi intención al principio era simplemente eso, llevar un diario de todo lo que sembraba y hacía en el huerto. Apuntar las fechas en las que se iban haciendo las cosas, por si mi memoria fallaba, tenerlo apuntado en algún lado y tenerlo a mano para poder consultarlo desde cualquier sitio en cualquier momento.
De eso hace ya 8 años ( 4 – 01 – 2009 ), y a veces cuando leo las primeras entradas las veo muy … dejémoslo en poco elaboradas, jeje. Me dan ganas de cambiarlas, de reescribirlas, pero no lo hago porque creo que este blog perdería su esencia. Así puedo ver como he ido cambiando, madurando. No sólo en el huerto, sino en la vida. Me he ido volviendo más ecológica, cuidar más mi salud cuidando lo que como, y apreciando cada día más la suerte y la tranquilidad que me proporciona poder cultivar mi huerto.
Al principio del blog, mis entradas sólo las leían algún amigo y yo. Tampoco me importaba porque el uso que le daba era tipo agenda. Con el tiempo, compartir mi experiencia ayudaba a la gente, y la gente confiaba en mí y me preguntaba sus dudas.
Así que decidí usar el blog, no sólo para ayudarme a mí a no olvidar las cosas, sino también para ayudar a la gente con sus dudas y problemas.
Y en ello estamos.