La cebolla es una especie bienal, que no suele superar el metro de altura. El bulbo que se forma en la raíz es una deliciosa hortaliza que constituye un pilar fundamental de la dieta mediterránea. Tanto cruda como cocinada, su sabor y olor son inconfundibles debido a sus compuestos azufrados.
La cebolla tiene una composición nutritiva similar a otras hortalizas: alto contenido de agua y menos porcentaje de materia seca, carbohidratos, proteínas y lípidos.
Descripción y variedades
Básicamente la cebolla tiene cuatro partes diferenciadas: tallo, pocas hojas, bulbo y, generalmente, una flor. Las hojas son huecas, de forma tubular y sección redondeada. Se reconocen tres tipos principales de cebollas: de día corto, de día intermedio y de día largo.Las cebollas de día corto forman sus bulbos con cerca de 12 horas de luz. Son cebollas tempranas que se venden inmaduras a finales de primavera. Entre 12 a 14 horas de luz necesitan las cebollas intermedias para formar sus bulbos. Las cebollas de día largo forman bulbos con 14 o más horas de luz. Son las cebollas tardías que se cosechan entre enero y marzo y por su alto potencial de conservación se usan para almacenamiento. Suelen ser grandes, redondas y de color amarillo a cobrizo.
Existen otras variedades como las cebollas para encurtidos, cebollas blancas, rojas, dulces, cebollines, etc.
Clima y suelo
La mejor condición climática para la cebolla es una temperatura moderadamente fría antes del crecimiento del bulbo. Necesitan, a su vez, tiempo cálido durante el desarrollo, cosecha y secado del bulbo. Un clima seco es el mejor para curar la raíz. Requiere una temperatura óptima durante el cultivo de entre 15 y 21° C. Como se trata de una planta bianual, requiere de temperaturas de 4 a 10° C para que nazcan las flores. Éstas son esenciales para obtener semillas de cebolla.Los suelos no tienen que ser muy compactos, con una proporción media de arcilla y no excesiva humedad. Los suelos pedregosos producen bulbos de tamaño irregular. La cebolla prefiere suelos poco ácidos (entre 6 y 7 de pH).
Enfermedades y plagas
La cebolla sufre varias enfermedades y plagas a lo largo de su desarrollo. Existen enfermedades como Mildiú, que afecta al follaje con manchas blancas en las hojas, el hongo Pyrenochaeta terrestris que pudre las raíces, o Botrytis, que ablanda la zona del cuello del bulbo y lo pudre.Las plagas más habituales de esta hortaliza son los 'trips' de la cebolla, la mosca de la cebolla -acaba con la base de las plantas pequeñas- y la cuncunilla, que destruye el follaje.
Semillas y cultivos
La cebolla se propaga por semilla en siembra directa, por bulbos y también en transplante, siendo éste último sistema el más utilizado. Para sembrar mediante simiente, hay que limitar el cultivo a 8 ó 10 gramos por metro cuadrado, generalmente en hileras, en surcos de entre 10 y 12 cm. de distancia. Esta manera de sembrar permite controlar la aparición de malas hierbas.A la hora de regar, es necesario hacerlo de manera generosa una vez plantadas las cebollas. El agua abundante asegura una buena germinación y el desarrollo de una planta sana.
Imágenes/Flickr: Paul Lowry, Mhiguera, Happy days photos and art, Vic Lic y Manel.