En tiempos donde la privacidad se ha convertido en una necesidad y en un lujo, las soluciones naturales y el uso de ejemplares vivos como los cipreses para setos se han posicionado como la alternativa perfecta para quienes buscan alejarse de las miradas ajenas y del bullicio urbano. Los cipreses, con su majestuosidad y su crecimiento denso, ofrecen una excelente opción para quienes buscan este tipo de soluciones en sus jardines.
Por qué utilizar los cipreses para crear setos
Los cipreses son una elección popular para setos por diversas razones:Crecimiento rápido: pueden alcanzar una altura considerable en un tiempo relativamente corto, otorgando privacidad rápidamente.
Densidad: su follaje espeso brinda una barrera visual y contra el viento, silenciando parcialmente los sonidos exteriores.
Longevidad y Resistencia: son conocidos por su longevidad y resistencia a enfermedades, además de ser resistentes a distintas condiciones climáticas.
Estética: su apariencia es elegante, adaptándose a diversos estilos de paisajismo. Leer más: 13 arbustos perennes de rápido crecimiento.
Características agronómicas del ciprés
Marco de separación entre cipreses: para un seto denso, planta los cipreses entre 60 a 80 cm de distancia el uno del otro. Si buscas un seto más aireado, puedes aumentar la distancia a 1 a 1,2 metros.Hoyo de plantación: cava un hoyo que sea aproximadamente dos veces el tamaño del cepellón. Esto permite un buen desarrollo de las raíces.
Materia orgánica: enriquece la tierra con compost o estiércol bien descompuesto. Esto mejora la estructura del suelo y provee nutrientes esenciales. De media, aporta 2 a 3 kg de materia orgánica procedente de compost o estiércol animal y hoyo de plantación.
Dosis y frecuencia de riego: inmediatamente después de plantar, riega profundamente. Durante las primeras semanas, asegúrate de mantener el suelo húmedo. Una vez establecidos, los cipreses son relativamente tolerantes a la sequía, pero aún requieren riegos consistentes. Ten en cuenta que el mayor enemigo de este tipo de coníferas es el exceso de humedad en la tierra, ya que la principal enfermedad que afecta a los cipreses es Phytophthora, que causa el conocido como amarronamiento de las coníferas. Para solucionarlo, se suele utilizar Fosetil-Al, pero no siempre se llega a tiempo.
Fertilización: aplica un fertilizante equilibrado en primavera y verano para promover un crecimiento sano y vigoroso. Un fertilizante recomendado es utilizar un gránulo NPK 12-8-16 con magnesio y micronutrientes, ya que aporta todo lo que el ciprés pueda necesitar para favorecer una brotación vigorosa y cubrir los espacios vacíos entre setos rápidamente.
Poda: para mantener un seto denso y ordenado, pódalo anualmente (preferiblemente después del verano y antes de que entren las bajas temperaturas). La mejor época es al final del invierno o inicio de primavera, antes del nuevo crecimiento. La mejor herramienta son los cortasetos eléctricos o a batería, ya que te permiten generar cortes rectos con muy poco esfuerzo.
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Principales variedades de cipreses para setos
Ciprés leylandii: es una de las variedades más populares para setos por su rápido crecimiento y el más utilizado mundialmente para el diseño de cipreses para setos.
Ciprés común (Cupressus sempervirens): conocido por su forma columnar, es ideal para setos formales.
Ciprés de Monterrey (Cupressus macrocarpa): tiene un follaje de tono azul-verdoso, añadiendo un toque distintivo al jardín.
Ciprés calvo (Taxodium distichum): es una opción menos común pero se destaca por su adaptabilidad a suelos húmedos. En conclusión, si buscas una solución natural y elegante para generar privacidad en tu espacio exterior, los cipreses son una excelente opción. Con un poco de cuidado y mantenimiento, pueden ofrecerte un seto hermoso y duradero. ¡Anímate a incorporar estos majestuosos árboles en tu jardín!