Si en las semanas anteriores en Semillas Huerta y Jardín nos lanzamos en defensa de nuestros huertos y jardines contra los pulgones y la roya, hoy vamos a enfrentarnos a la antracnosis. No os asustéis, suena peor de lo que es.
La antracnosis es causada por un hongo -generalmente de los géneros colletotrichum, gloeosporium, o la especie coniothyrium fuckelii- y afecta tanto a árboles frutales como a pastos u hortalizas.
¿Cómo sabemos que nuestras plantas tienen antracnosis? Es sencillo, vamos a ver en ellas manchas de diferentes colores en las hojas, los frutos, los vástagos o las yemas. Se trata de manchas oscuras, hundidas y bien delimitadas por una o más aureolas concéntricas que, una vez se han secado, se asemejan a una quemadura. También podemos hallar necrosis en los nervios, tallos, frutos o flores.
¿Qué producen estas manchas? Al crecer, acaban causando la defoliación de las ramas ?las hojas caen de manera prematura- y la muerte y sequía de los frutos afectados. A veces, la parte manchada acaba cayendo dejando un hueco en nuestra planta.
¿Qué hacemos para combatirla? En primer lugar y como siempre recomendamos en Semillas Huerta y Jardín, la prevención es básica: si cuidamos bien nuestros cultivostendremos la mejor defensa contra este tipo de enfermedades.
Debemos realizar una buena limpieza de todo el material del suelo, que es donde permanecen las esporas hasta que al llegar la primavera se activan ?el viento y la lluvia favorecen la dispersión de los hongos que causan esta enfermedad-. De igual manera, tendremos que limpiar nuestros jardines, eliminando las malas hierbas, para evitar la acumulación de agua y mejorar la aireación.
También podemos desinfectar nuestras herramientas de jardinería con una solución de lejía para evitar su propagación.
No hay que olvidar que un buen riego y una fertilización adecuada harán más fuertes nuestros cultivos, por lo que serán más resistentes al contagio.
Una vez que nuestros cultivos ya han sido atacados, es importante destruir los tejidos vegetales afectados. No olvidéis que las hojas infectadas que caigan al suelo serán una fuente de esporas que podrán infectar nuestras plantaciones el año siguiente.
Y, por último, debemos recurrir al uso de fungicidas. En el caso de que hayamos tenido infecciones en años anteriores, el fungicida se puede aplicar de manera preventiva, antes de que aparezcan las manchas.
¡Feliz siembra!